domingo, 31 de marzo de 2019

345 El Evangelio del Amor


1 de Juan 3:5 “Y saben que el Mesías se manifestó para quitar los pecados, y en El no hay pecado”

El Padre cargo las violaciones de la ley, pasadas, presentes y futuras de toda la humanidad, en Jesús, y El las llevo en su cuerpo a la cruz. Jesús fue capaz de hacer esto, porque en Él no había pecado. En otras palabras, toda la humanidad accede a la remisión de sus pecados, por la fe en la historia de Jesús.

1 de Juan 3:6 “Todo el que permanece en El no peca, todo el que peca, no Lo ha visto, ni lo ha conocido”

La comunión con Jesús resucitado es el resultado, primero, de ser un canal del amor misericordioso, de la bondad y tolerancia del Padre, y segundo, de retener en la mente Su historia, especialmente en la cruz. Ahora, este amor hace que la fe de un creyente sea viva, por eso el mal heredado de Adán no fructifica en él, o sea no peca.

1 de Juan 3:7 “Hijos míos, que nadie los engañe, el que practica la justicia es justo, como Él es justo”

Hay que diferenciar la justicia del antiguo pacto, que es la observancia de la ley, de la justicia del nuevo pacto, que es la vida y la muerte de Jesús, que muestra que el Padre es Justo. Por otro lado, solo el que ha sido justificado, al aceptar la historia de Jesús, puede ser justo, es decir, permanecer en El, al ser un canal del amor de Dios, y vivir de la fe.

1 de Juan 3:8 “El que practica el pecado es del diablo, porque el diablo peca desde el principio. Para esto se manifestó el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo”

El maligno rivalizo con Dios desde hace mucho, en el cielo, y se separó de Él, es decir, peco; y en la tierra, desde que Adán cayo, la humanidad fue bajo el poder de satanás, separada de Dios, es decir en pecado. Ahora, la ley hizo evidente que el hombre no puede unirse a Dios. Para esto vino el Hijo de Dios para unir, por la fe, al hombre al Padre.

1 de Juan 3:9 “Todo el que ha sido engendrado de Dios no practica el pecado, porque la semilla de Él, en el permanece, y no puede pecar, porque es nacido de Dios”

La semilla de Dios es puesta en la mente de una persona que acepta que Jesús fue sacrificado, por el amor del Padre. Con esta semilla se inicia el camino estrecho que es el camino de la fe. Entonces, la semilla de Dios es Su Palabra, por ejemplo “Tanto amor Dios tiene al hombre que dio a Su único Hijo, y todo el que tenga fe, tenga vida eterna”

1 de Juan 3:10 “En esto son aparentes los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo el que no practica la justicia, no es de Dios, tampoco aquel que no ama a su hermano”

Algunos piensan que practicar la justica es guardar los diez mandamientos, pero esa era la justicia del antiguo pacto, en el pacto nuevo, practicar la justicia es vivir dependiendo de la conducta de Jesús, cuando estuvo en esta tierra, es decir, tener presente que Él es la Cabeza del creyente, seguida del amor misericordioso a los de la fe”

1 de Juan 3:11 “Porque este es el mensaje que hemos escuchado desde el principio: Que nos amemos unos a otros”

La misión que el Padre encargo a Su Hijo en esta tierra, debía pasar por Su sacrificio, y tenía como propósito unir, a los que den valor al relato de esta misión, con el Padre y el Hijo, con el fin de que, mediante el Espíritu, puedan ser canales de la misericordia, compasión, y tolerancia de Dios a los que comparten esta fe.

lunes, 18 de marzo de 2019

344 El Evangelio del Amor


1 de Juan 2:27 “Y la Unción que ustedes recibieron de El permanece en ustedes, entonces, ningún beneficio tiene de que alguien les ensene, porque Su Unción les enseno la verdad acerca de todo, y no la mentira, por lo tanto, como les ha ensenado, permanezcan en El”

La Unción es el símbolo para referirse a la presencia del Espíritu de Dios en la persona, que ha prestado atención a la historia de Jesús en la cruz, para ensenarle la verdad acerca de todo, con el objeto de que permanezca unida a Jesús, mediante la fe en El, y al dejar fluir el amor misericordioso a los que les rodeen.

1 de Juan 2:28 “Y ahora hijos, permanezcan en El, para que cuando se manifieste tengamos confianza, y no seamos avergonzados, siendo separados en Su venida” 

La palabra griega parousia, traducida venida, sígnica visita, es decir venir para visitar y regresarse, así será la visita de Jesús de 1 Tes 4:15,16, El vendrá en las nubes, y recibirá a los que han permanecido en El, por la fe en el significado de su muerte, y por haber sido canales de Su misericordia, y los llevara con El, para las bodas del Cordero.

1 de Juan 2:29 “Si han visto que es Justo, conocen que todo el que hace justicia es nacido de El”

Cuando Adán cayo, la humanidad fue condenada por un pecado que no cometió, pero los que han considerado que Dios mostro su justicia cuando Jesús fue crucificado, porque llevo los pecados de toda la humanidad, además los mato a la ley, para que el pecado pierda su poder en ellos, son canales del amor de Dios, porque son nacidos de lo alto”

1 de Juan 3:1 “Valoren el gran amor que nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios, por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a El”

Dios es amor, y a fin de que los que reconocen que la historia de Jesús nace de Su amor, sean Sus descendientes espirituales, les compartió Su amor, es decir les hizo capaces de ser misericordiosos, compasivos, tolerantes, bondadosos, y por esto sean llamados hijos de Dios, pero no por el mundo, sino por seres celestiales.

1 de Juan 3:2 “Amados, ahora somos hijos de Dios, pero aun no ha sido manifestado lo que seremos, sin embargo, sabemos que cuando sea manifestado seremos semejantes a Él, porque lo veremos como Él es”

Los que admiten que la historia de Jesús nace del amor del Padre, ahora son Sus descendientes espirituales, porque les hizo canales de Su misericordia, bondad, compasión, tolerancia, pero todavía no se sabe cómo será la nueva naturaleza de ellos, lo que se sabe es que tendrán una apariencia como la de Jesús resucitado.

1 de Juan 3:3 “Y todo el que tiene esta esperanza en El, se purifica a sí mismo como Él es puro”

Si la historia de Jesús se extiende al futuro, nace la esperanza de la gloria en Su visita, es decir nace la expectativa de ser físicamente trasformados, y tener una naturaleza gloriosa, inmortal, y anima a entender el significado de Jesús, en la cruz, o sea, a considerarnos limpios de todo pecado, y la mente libre del poder mal, al matarnos a la ley, en su muerte.

1 de Juan 3:4 “Todo el que hace el pecado, también viola la ley. Si, el pecado es la violación de la ley”

El pecado es la separación de Dios, y de todos, o sea, es la separación de la fuente del amor, porque Dios es amor, así mismo, se pierde la vida, porque Dios es la vida; Adán cayo en este pecado, y la humanidad lo heredo. Y el fruto de este pecado es quebrantar la ley que Dios dio a Israel, por medio de Moisés.

 

domingo, 10 de marzo de 2019

343. El Evangelio del Amor


1 de Juan 2:20 “Pero ustedes son ungidos del Santo, y todos ustedes lo saben”

El Espíritu Santo que es derramado en las personas que aceptan la historia de la vida de Jesús, centrándose en Su sacrificio. En estos creyentes la salvación es una realidad, porque en la caída de Adán la humanidad quedo separada de Dios, es decir de la vida y el amor, pero por la muerte de Jesús los creyentes son unidos a Dios mediante el Espíritu divino.

1 de Juan 2:21 “No les he escrito porque no conocen la verdad, sino porque la conocen, y saben que ninguna mentira procede de la verdad”

La verdad es Jesús, sus actos y enseñanzas, y Juan les escribe a los que han aceptado la verdad, es decir, la historia de Jesús, y han entendido por que murió, resucito y ascendió, y saben que de El no procede la mentira, sino solo la verdad, porque la verdad es de Dios, y que, el padre de la mentira es satanás.

1 de Juan 2:22 “Quien es el mentiroso? Sino el que niega que Jesús es el Mesías. Este es el anticristo, el que niega al Padre y al Hijo”

El que rechaza que Jesús es el que Padre ungió, quien siendo parte de la divinidad se hizo hombre, para cumplir la misión que Él le encargo, y que fue la de unir con Dios a todo el que acepte, entendiendo, la historia de Su vida, y al mismo tiempo, muestre cuan justo es Dios, y lo exhiba en la cruz, ese es el anticristo.

1 de Juan 2:23 “Todo el que niega al Hijo, tampoco tiene al Padre, y el que reconoce al Hijo, también tiene al Padre”

Jesús no vino a unir al hombre a Dios por decisión propia, sino que Dios, el Padre le envió con esa misión, por Su amor misericordioso al hombre, por esto el que rehúsa a Jesús, se aparta de Dios Padre, o sea persiste en el pecado, porque, el pecado es separación de Dios. Pero, el que recibe la historia de Jesús, está unido al Padre.

1 de Juan 2:24 “Respecto a ustedes, permanezca en ustedes lo que oyeron desde el principio. Si en ustedes permanece lo que oyeron desde el principio, ustedes permanecen en el Hijo y en el Padre”

El nacimiento de lo alto es cuando Dios pone en la mente de una persona palabras de la muerte de Jesús, esas palabras que son pensamientos, si se reflexiona en ellas hasta entenderlas, quedan en la mente, y esa persona empieza el camino unido al Hijo y al Padre, y ha vencido al pecado, que es separación de Dios, porque esta con El.

1 de Juan 2:25 “Y esta es la promesa que El nos prometió: La vida eterna”

Desde que Adán se separó de Dios, toda la humanidad quedo separada de Dios, dando por resultado que toda persona viva para complacerse, esto es para buscar la satisfacción de todo deseo. Pero vino Jesús, y vivió sirviendo y murió negando todo deseo, y resucito para dar a los que acepten Su historia, Su vida de servicio abnegado.

1 de Juan 2:26 “Esto les he escrito a ustedes, sobre los que están intentado engañarlos”

El aposto les escribió a los que vivían prestando atención a la historia de Jesús, especialmente de Su muerte, para armarles del conocimiento necesario, para oponerse a los que intentaban ensenar, a sustituir la obediencia perfecta de Jesús a la misión que el Padre le confió, al venir a esta tierra, por su obediencia a la ley.   

martes, 5 de marzo de 2019

342. El Evangelio del Amor


1 de Juan 2:13 “Les escribo a ustedes padres porque han conocido a Aquel que es desde el principio, les escribo a ustedes jóvenes porque han vencido al maligno, les escribo a ustedes niños, porque han conocido al Padre”

El Padre envió a Su Hijo para acabar con la ignorancia respecto a Él, por esto, Jesús aclaro que lo que hacía o decía era solo lo que el Padre le hablo, u ordeno hacer. El apóstol escribió esta carta a los padres, jóvenes y niños que tenían claro que Jesús vino a cumplir la misión que el Padre le encargo, para que los creyentes le conozcan.

1 de Juan 2:14 “Les escribí a ustedes padres, porque han conocido al que es desde el principio, les escribí a ustedes jóvenes, porque son fuertes y la Palabra de Dios permanece en ustedes y han vencido al maligno”

La comprensión de que la obra y las enseñanzas de Jesús son el fruto del amor del Padre al hombre caído hace que se Le conozca. Y empieza la vida espiritual en una persona, porque la Palabra de Dios tiene espacio en su mente, y la fortalece al afirmarse la historia de Jesús, entonces, el perdón de sus pecados y la muerte a la ley son una realidad.

1 de Juan 2:15 “No amen el mundo, ni lo del mundo. Si alguien ama al mundo, el amor del Padre no está en el”

El mundo, para Jesús, era el medio ambiente que le rodeo, es decir, el judaísmo de la ley y su vida social, por esto le pidió al Padre (Juan 17) que les proteja del mundo a sus seguidores, así mismo, le informo que el mundo les aborreció, porque ya no son del mundo al darles las Palabras de la gracia. Por eso les ordeno que no amen el mundo.

1 de Juan 2:16 “Porque todo lo que hay en el mundo, la codicia de la carne, la codicia de los ojos, y la arrogancia de la vida no proviene del Padre, sino del mundo”

Para Pablo, igual que para Jesús y Juan el mundo es el espacio de la ley, o sea donde reina la codicia (Romanos 7:7) Porque la ley da vida y poder a los deseos, de modo que ya no es posible controlarlos (Rom 7:8, 1 Cor 15:56) Pero toda concupiscencia perdió poder, cuando, en su cuerpo, Jesús mato a la ley a los creyentes (Rom 7:4)

1 de Juan 2:17 “El mundo y sus deseos sin control pasa, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre”

El mundo y sus concupiscencias es el ámbito de la ley, porque la escritura encerró a todos, por medio de la ley, bajo pecado (Gal 3:22-23) para que necesiten de la salvación que Dios alcanzo en Jesús, en la cruz. El que hace la voluntad de Dios es el que se apropia de la victoria de Jesús con una fe viva, es decir con la fe que nace de Su misericordia.

1 de Juan 2:18 “Hijitos esta es la hora final, y como oyeron que el anticristo viene, ya han surgido muchos anticristos, por esto sabemos que es la hora final”

Juan tuvo las revelaciones del apocalipsis, y entendió, que una de las señales más prominentes, que indicaran que el regreso de Jesús para gobernar la tierra es inminente, es el surgimiento de un personaje, que engañara a la mayoría, diciendo que es el Mesías. En los días de Juan hubo anticristos, por eso él dijo que ya es el fin.

1 de Juan 2:19 “De nosotros salieron, pero no eran de nosotros, porque si hubieran sido de nosotros habrían permanecido con nosotros, pero salieron a fin de se manifieste que no todos son de nosotros”

Anticristo significa en lugar, o en contra de Jesús el Mesías. A lo largo de la historia han surgido personajes que se han puesto en lugar de Jesús el Mesías, o en contra de Él. Pero, antes que venga Jesús a reinar en la tierra, será levantado el anticristo, que unificara a todos los que no han aceptado el amor de la verdad en Jesús.

341. El Evangelio del Amor


1 de Juan 2:6 “El que dice que permanece en El, debe andar como el anduvo” 

El apóstol indica que el que afirma que se mantiene en Jesús resucitado, debe seguir las pisadas de Jesús, es decir, Él vivió negándose a sí mismo desde el desierto de la tentación, camino en el servicio abnegado, hasta que murió crucificado; o sea, el creyente debe vivir muerto a la ley, para no estar unido al pecado, sino a Jesús.

1 de Juan 2:7 “Hermanos, no les escribo un mandamiento nuevo, sino un mandamiento antiguo, el que tuvieron desde el principio, el mandamiento antiguo es la palabra que oyeron”

El mandamiento antiguo dado a los que han aceptado la historia de la vida de Jesús, al que se refiere Juan es la Palabra que Dios la sembró desde el cielo, y que se conoce como el nacimiento de lo alto, con el que se dio comienzo a la fe, y puede ser “tanto amo Dios al mundo, que dio a su Hijo Único, para que todo el que en Él tenga fe, tenga vida eterna”

1 de Juan 2:8 “Nuevamente, les escribo un mandamiento nuevo a ustedes, que es verdadero en El y en ustedes, porque las tinieblas se pasan y la luz verdadera, ahora, alumbra”  

El mandamiento nuevo que Juan escribió es que los que han aceptado la historia de Jesús, especialmente, la de su muerte, se amen entre ellos como El los amo. El apóstol considero que era ya el tiempo de hacer efectivo ese amor, porque algunos creyentes habían entendido que Jesús los mato en su cuerpo a la ley, para unirlos a Él.

1 de Juan 2:9 “El que dice que esta en la Luz y aborrece a su hermano, aún está en tinieblas”

La aceptación de la historia de Jesús se convierte en la Fe viva, cuando los dos logros de El en la cruz llegan a cubrir a los creyentes, uno, que el Padre descargo en Jesús los pecados de toda la humanidad, y dos, que Jesús mato al creyente a la ley, en su cuerpo, para que se una a Él, y pueda amar. Entonces, la fe del que aborrece no es viva.

1 de Juan 2:10 “El que ama a su hermano permanece en la Luz, y en él no hay ocasión de caer”

La Luz es Dios, y Dios es amor, por esto el que es misericordioso, tolerante, bondadoso, compasivo con su hermano, esta en la Luz, es decir esta con Dios. Por otro lado, los mandamientos de Jesús a los de la fe es que amen a sus hermanos como El los amo, y que vivan de la historia de Jesús, porque Él los quiere consigo “ 

1 de Juan 2:11 “Pero el que aborrece a su hermano está en las tinieblas, y camina en las tinieblas, y no conoce a donde va, porque las tinieblas han cegado sus ojos”

La relación de una persona con Dios se conoce en la bondad, misericordia, y compasión con sus hermanos de fe, y no se conoce por su piedad, o virtud. El que no ama a su hermano en la fe, todavía está en tinieblas, o sea bajo el poder del pecado. Todavía no está unido a Jesús, porque no ha aceptado que fue muerto a la ley, cuando El murió.

1 de Juan 2:12 “Les escribo a ustedes hijos, porque han sido remitidos sus pecados, por medio de nombre de El”

El Padre envió a Jesús para terminar el poder del pecado, y a acabar la separación del hombre de Dios, separación que empezó con la caída de Adán, esta separación incluye que quedo lejos de la fuente del amor y de la vida, por eso no ama, y tiene que morir. Para terminar la separación de Él, el Padre descargo en Su Hijo los pecados de la humanidad, y el Hijo mato en su cuerpo, a la ley, a los creyentes, y Resucito.

340. El Evangelio del Amor


1 de Juan 1:9 “Si confesamos nuestros pecados el es fiel y justo, porque remitió nuestros pecados, y nos limpió de toda maldad”

Dios nos hizo herederos de la maldad de Adán, por esto pecamos, pero, el mismo Dios remitió los pecados de la humanidad al cuerpo de Su Hijo, en el Getsemaní, quien los llevo a la cruz; y así Él es fiel y justo, porque nos limpió de toda iniquidad. Y todos los que aceptan como verdad esta realidad tienen acceso a la salvación, al Espíritu Divino.

1 Juan 1:10 “Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a El mentiroso y Su Palabra no está en nosotros”

Los pecados son parte del pasado y del presente de los que han aceptado la historia de Jesús, como la expresión de la misericordia de Dios a ellos. Por un lado, el pecado de Adán fue contra la fe, pero cuando fue dada la ley en el Sinaí, todos cayeron en los pecados regulares. Para que alguien sea salvo por la fe, debe reconocerse culpable de los pecados regulares

1 de Juan 2:1 “Hijitos míos, les escribo esto para que no pequen, y si alguien peca tenemos un consolador ante el Padre, a Jesús, el Mesías, el Justo”

Jesús, cuando satanás pidió a Dios para zarandear a Pedro, oro al Padre para que la fe de Pedro en El no falle, y aunque el negó que conoce a Jesús, o sea peco, pero una vez que peco, Jesús le miro con una inmensa misericordia, y despertó en el apóstol la fe. Entonces, lo que Dios quiere es que la fe de los humanos no falle, aunque rompan la ley, como Pedro.

1 de Juan 2:2 “Y Él es la propiciación de nuestros pecados, y no solo de nuestros pecados, sino de todo el mundo”

El propiciatorio era la tapa de oro que cubría el arca del pacto y simbolizaba a Jesús sacrificado, que hizo posible que el hombre sea unido a Dios, habiendo sido separado de Dios por el pecado de Adán. O sea, estando lejos de la vida y del amor, debía morir, pero gracias al sacrificio de Jesús fue unido a Dios, a la vida y al amor

1 de Juan 2:3:” Y en esto sabemos que le hemos llegado a conocer, si guardamos sus mandamientos”

Los mandamientos de Jesús a sus discípulos son dos; el amarse unos a otros como El los amo, y la fe, estos son los mandamientos del nuevo pacto. Por otro lado, los diez mandamientos son como las paredes de una cárcel, que mantiene encerrados a aquellos a quienes será revelada la historia de Jesús, es decir la fe.

1 de Juan 2:4 “El que dice Yo le he conocido, y no guarda sus mandamientos es mentiroso y la verdad no está en el”

Conocer en las cartas de Juan es parecido a la relación de una esposa con su esposo amante, o sea que la respuesta del creyente al amor de Jesús derramado en la cruz es la obediencia a sus dos mandamientos, uno, el amar a los demás como El amo a sus discípulos, y dos, el vivir de la historia de Jesús, es decir, vivir de la fe.

1 de Juan 2:5 “Pero el que guarda Su palabra, en el verdaderamente se ha perfeccionado el amor de Dios. En esto sabemos que estamos en El”

El que guarda Su palabra es el que acoge en sus pensamientos, las palabras que Dios ha puesto en su mente, y estas palabras son el relato de las obras y enseñanzas de Jesús, de esta manera, Dios ha completado Su amor en el creyente. Así termina la separación de Dios, de una persona.

339. El Evangelio del Amor


1 Juan 1:2 “Y la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y anunciamos a ustedes la vida eterna, la que estaba con el Padre fue manifestada a nosotros”

En Jesús, el Mesías la vida de Dios fue manifestada, la vida de Dios no es la misma que nuestra vida. Adán cuando fue creado reflejaba la vida de Dios, para hacer el bien, pero cuando se separó de Dios, ya no reflejo la vida de Dios, sino que empezó a vivir para complacerse, pero Jesús vivió para servir abnegadamente hasta que murió en la cruz.

1 Juan 1:3” Lo que hemos visto y oído les anunciamos, a fin de que tengan comunión con nosotros. En realidad, nuestra comunión es con el Padre y con Su Hijo Jesucristo”

Lo que los apóstoles vieron de Jesús, su misericordia con los pecadores y errados, su bondad, sus curaciones, su muerte en la cruz, su resurrección y ascensión. así como sus palabras que escucharon, que son la revelación del Padre, anunciaron a los que les prestan atención, para que tengan comunión con la divinidad y con los de la fe.

1 de Juan 1:4 “Y esta les escribimos a ustedes, a fin de que nuestro gozo sea completo”

Juan indica que esta carta es para que nuestro gozo sea completo; no escribió para que sus lectores estén llenos de gozo al leer acerca del Mesías, su naturaleza, su manera de ser, sus obras, que le llevaron a la muerte, y a su resurrección, todo como fruto de su misericordia, sino para que esto cause gozo en nosotros, o sea en Jesús, los apóstoles y los lectores.

1 de Juan 1:5” Y este es el mensaje que hemos oído de Él, y que les anunciamos: Que Dios es luz, y no hay en El tiniebla alguna”

El mensaje que Jesús enseno a los apóstoles, sus testigos es que Dios es Luz. De la luz física podemos aprender que la luz en si es invisible, pero al chocar con algo se hace visible e ilumina, y trae vida, así es Dios en la mente humana solo si Él llega a los pensamientos ilumina toda la mente y la vivifica; Dios llega a los pensamientos por medio de Su Palabra.

1 de Juan 1:6 “Si decimos que tenemos comunión con El, y caminamos en tinieblas, mentimos, y no practicamos la verdad”

Si decimos que Dios ha puesto Su Palabra en nuestros pensamientos, esto es su Espíritu nos da Su Luz, es decir que tenemos parte con El, sin embargo, todavía el mal heredado de Adán guía nuestros pasos, estamos en tinieblas y mentimos, o sea no vivimos en la verdad. Porque la esencia intima de la vida de fe es la relación con Dios.

1 de Juan 1:7 “Pero si caminamos en la luz, como El es en la luz, tenemos comunión unos con otros y la sangre de Jesús, Su Hijo nos limpia de todo pecado”

Dios es luz, Su Espíritu es luz, y si la fe en la historia de Jesús nace de Su misericordia hacia el creyente, entonces, este es dirigido por el Espíritu de Dios, y tiene comunión con los demás, porque el Espíritu hace actual la remisión de sus pecados. Hay que tener presente que los pecados nos separan unos de otros, pero el Espíritu nos une.

1 de Juan 1:8 “Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros”

Al decir que no tenemos pecado se asume la falsa inocencia de Caín, al llevar su ofrenda, porque desde que cayo Adán heredamos una fuente inagotable de pecados, por esto Abel se acerco a Dios con un animal sacrificado. Y el reconocimiento de esta realidad ayuda a valorar el hecho de que al morir Jesús mato al creyente a la ley, para quitar al pecado el poder de la ley”

338. El Evangelio del Amor


1 Juan 1:2 “Y la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y anunciamos a ustedes la vida eterna, la que estaba con el Padre fue manifestada a nosotros”

En Jesús, el Mesías la vida de Dios fue manifestada, la vida de Dios no es la misma que nuestra vida. Adán cuando fue creado reflejaba la vida de Dios, para hacer el bien, pero cuando se separó de Dios, ya no reflejo la vida de Dios, sino que empezó a vivir para complacerse, pero Jesús vivió para servir abnegadamente hasta que murió en la cruz.

1 Juan 1:3” Lo que hemos visto y oído les anunciamos, a fin de que tengan comunión con nosotros. En realidad, nuestra comunión es con el Padre y con Su Hijo Jesucristo”

Lo que los apóstoles vieron de Jesús, su misericordia con los pecadores y errados, su bondad, sus curaciones, su muerte en la cruz, su resurrección y ascensión. así como sus palabras que escucharon, que son la revelación del Padre, anunciaron a los que les prestan atención, para que tengan comunión con la divinidad y con los de la fe.

1 de Juan 1:4 “Y esta les escribimos a ustedes, a fin de que nuestro gozo sea completo”

Juan indica que esta carta es para que nuestro gozo sea completo; no escribió para que sus lectores estén llenos de gozo al leer acerca del Mesías, su naturaleza, su manera de ser, sus obras, que le llevaron a la muerte, y a su resurrección, todo como fruto de su misericordia, sino para que esto cause gozo en nosotros, o sea en Jesús, los apóstoles y los lectores.

1 de Juan 1:5” Y este es el mensaje que hemos oído de Él, y que les anunciamos: Que Dios es luz, y no hay en El tiniebla alguna”

El mensaje que Jesús enseno a los apóstoles, sus testigos es que Dios es Luz. De la luz física podemos aprender que la luz en si es invisible, pero al chocar con algo se hace visible e ilumina, y trae vida, así es Dios en la mente humana solo si Él llega a los pensamientos ilumina toda la mente y la vivifica; Dios llega a los pensamientos por medio de Su Palabra.

1 de Juan 1:6 “Si decimos que tenemos comunión con El, y caminamos en tinieblas, mentimos, y no practicamos la verdad”

Si decimos que Dios ha puesto Su Palabra en nuestros pensamientos, esto es su Espíritu nos da Su Luz, es decir que tenemos parte con El, sin embargo, todavía el mal heredado de Adán guía nuestros pasos, estamos en tinieblas y mentimos, o sea no vivimos en la verdad. Porque la esencia intima de la vida de fe es la relación con Dios.

1 de Juan 1:7 “Pero si caminamos en la luz, como El es en la luz, tenemos comunión unos con otros y la sangre de Jesús, Su Hijo nos limpia de todo pecado”

Dios es luz, Su Espíritu es luz, y si la fe en la historia de Jesús nace de Su misericordia hacia el creyente, entonces, este es dirigido por el Espíritu de Dios, y tiene comunión con los demás, porque el Espíritu hace actual la remisión de sus pecados. Hay que tener presente que los pecados nos separan unos de otros, pero el Espíritu nos une.

1 de Juan 1:8 “Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros”

Al decir que no tenemos pecado se asume la falsa inocencia de Caín, al llevar su ofrenda, porque desde que cayo Adán heredamos una fuente inagotable de pecados, por esto Abel se acerco a Dios con un animal sacrificado. Y el reconocimiento de esta realidad ayuda a valorar el hecho de que al morir Jesús mato al creyente a la ley, para quitar al pecado el poder de la ley”

337. El Evangelio del Amor


Colosenses 4:1 “Patrones traten con justicia y equidad a sus empleados, sabiendo en toda ocasión, que ustedes tienen, también, un Señor en el cielo”

Pagar salarios justos, y reconocer los beneficios que los empleados y trabajadores merecen por su labor, es una responsabilidad de los patrones que han aceptado la historia de la vida de Jesús, y su amor misericordioso, y que son parte de la familia de Dios. Ellos, también, deben tener en cuenta que Jesús es su Patrón, que está en el cielo.

Colosenses 4:2 “Perseveren en la oración y velen en ella con lenguaje agradecido”

La historia de Jesús es el modelo que dirige el comportamiento del de la fe; por ejemplo, Jesús mato a los de la fe, en Su cuerpo a la ley, entonces en estos el pecado ya no tiene el poder para esclavizarlos a las pasiones, y la oración es un fruto de esta fe, para pedir clarificación sobre el efecto de la historia de Jesús en la tentación al creyente.

Colosenses 4:3 “Orando, al mismo tiempo por nosotros, para que Dios nos abra una puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio del Mesías, por El cual he sido encarcelado”

Los de la fe también deben orar a Dios por los que entienden la historia de Jesús, y que les ha sido dado explicar a otros, para que tengan la oportunidad de evangelizar a muchas personas, porque es necesario que la obra de Jesús que culmino en la cruz sea conocida y entendida para que fructifique en las vidas de ellos.

Colosenses 4:4 “A fin de que yo lo manifieste como debo explicarlo”

El apóstol recibió del propio Jesús la revelación del misterio de Su vida, muerte y resurrección, sin embargo, pidió las oraciones de los de la fe, para que Dios le revele como debe explicar la historia de Jesús. El era muy celoso para llevar a cabo su misión de la manera más efectiva, a fin de que muchos lleguen a vivir de la fe.

Colosenses 4:5” Anden en sabiduría hacia los de afuera, aprovechando bien el tiempo”

En las relaciones con los que no son de la fe, no hay que perder el tiempo en conversaciones ociosas, y labores sin provecho, sino hay que rescatar el tiempo y usarlo para charlas que beneficien el espíritu y también para actividades de provecho material.

Colosense 4:6 “Que siempre lo que digan sea sazonado con sal, para que sepan responder a cada persona”

Esta instrucción es para los que han aceptado la historia de Jesús, especialmente, su muerte, es decir, han aceptado la misericordia divina derramada en ellos, y se refiere a la manera como deben conversar, esto es, sus palabras deben ser sencillas, bien pronunciadas, fácilmente comprensibles, para que sean el reflejo de lo que tienen en su mente

1 Juan 1:1 “Lo que existía desde el principio, lo que hemos escuchado, lo que hemos visto con nuestros propios ojos, lo que hemos contemplado, lo que han tocaro nuestras manos, acerca de la Palabra de Vida”

Juan, al igual que los otros apóstoles, recibieron la misión de ser testigos del Mesías, de su persona, sus obras, sus palabras, sus reacciones para poder testificar de Él. O sea, su testimonio es lo que sus sentidos experimentaron, lo que oyeron, vieron, contemplaron, tocaron al Mesías, y aprendieron que Él es Dios hecho humano.

336. El Evangelio del Amor


Colosenses 3:18 “Casadas estén sujetas a sus maridos como concuerda en el Señor”

Si, el esposo vive de la misericordia de Dios, tal como se derramo en la vida de Jesús, especialmente en su sacrificio, entonces Jesús es su cabeza, y es bueno que su esposa se sujete a él como cabeza, para formar un hogar ordenado, pero si el esposo no es de la fe, es difícil que la esposa se sujete a su esposo, porque la abusara.

Colosenses 3:19 “Los maridos amen a sus mujeres y no sean agrios con ellas”

La responsabilidad del marido es amar a su esposa, para que su hogar sea habitado por el amor inteligente del esposo a la esposa, y ella le responda sujetándose a él. Si el esposo no ama a su esposa con un amor inteligente, los integrantes de ese hogar serán carentes de misericordia, tolerancia y bondad.

Colosenses 3:20 “Hijos, obedezcan en todo a sus padres, porque esto es agradable al Señor”

Dios ordena que los hijos presten atención a sus padres y les obedezcan, para que los hogares de creyentes marchen con orden. En los hogares, en los que los padres viven de la misericordia de Dios dada en el sacrificio de Jesús, son los representantes de Dios en su hogar, por eso, los hijos al obedecer a sus padres obedecen a Dios.

Colosenses 3:21 “Los padres no provoquen a sus hijos, a fin de que no se desanimen”

Los padres no deben abusar de su autoridad y exigir a sus hijos una conducta más allá de sus capacidades, al contrario, sus órdenes deben dar margen para que los hijos puedan desarrollar su iniciativa y sean creativos. Así mismo, sus hijos no deben ser el blanco de sus críticas, más bien deben animarlos con ideas.

Colosenses 3:22 “Los siervos obedezcan en todo a sus patronos terrenales, no para ser vistos, como los que quieren agradar a los hombres, sino con sinceridad de corazón, temiendo a Dios”

Dios desea que la sociedad sea organizada en los lugares de trabajo, por esto manda que los trabajadores obedezcan a sus patronos, no para agradarles a ellos sino por respeto al Altísimo; desgraciadamente, muchos patronos victimas de su codicia, han abusado a sus trabajadores, y han dado lugar a sociedades injustas.

Colosenses 3:23 “Y todo lo que hagan, háganlo con inteligencia, como para el Señor, y no para los hombres”

Dios ordena que los que han aceptado la vida de Jesús para terminar con su separación de Dios, y ser morada del Espíritu, también sean eficientes en los trabajos materiales de este mundo, es decir que hagan todo pensando bien, a fin de que todo sea bien hecho; y de esta manera el Padre sea honrado por los de la fe.

Colosenses 3:24 “Sabiendo que del Señor recibirán la recompensa de la herencia, porque sirven al Señor, el Mesías”

Es claro, que gracias a que Jesús acabo con el poder y la actividad del pecado al vencer toda tentación, al cargar en si los pecados de la humanidad, y al matar en su cuerpo a los creyentes a la ley, los que aceptan Su historia son hechos parte de la divinidad, y por lo mismo, siervos del Mesías, y serán premiados según su trabajo.

Colosenses 3:25 “Porque el que obra la injusticia, recibirá la injusticia que ha hecho, sin acepción de personas”

Jesús afirmo que todo lo que el hombre siembre eso mismo cosechara, y que todo lo que se quiere que le hagan a uno, eso mismo debe hacer, primero, y también, ojo por ojo, y diente por diente. Lo que uno hace a otros, eso mismo le harán Esta es la ley: Si se hace el bien, el bien se recibirá y si se hace el mal el mal le darán.

335 El Evangelio del Amor.


Colosenses 3:10 “Ustedes se han vestido del nuevo, el que es renovado parecido al que lo fabrico”

El que vive de la misericordia de Dios que fluye de la historia del sacrificio de Jesús, está cubierto con la conducta inmaculada de Él, aunque en su mente brote el mal, pero la conducta y virtudes del Hijo van transformándole al creyente, de tal manera que poco a poco su comportamiento es como el de Él.

Colosenses 3:11 “Al estar vestidos del Mesías no hay griegos, ni judíos, circuncisos, o incircuncisos, extranjeros, salvajes, siervos, o libres, sino que el Mesías es todo en todos”

El que vive de la misericordia de Dios, que mana de la muerte de Su Hijo, esta cobijado de Su vida purísima, y lentamente es renovado hasta ser parecido a Él, a la vez que desaparece toda distinción cultural, moral, y racial, y cada vez son menos los rasgos personales del carácter del creyente, porque han sido reemplazados por los de Jesús.

Colosenses 3:12 “Es decir, ya que son elegidos de Dios, santos y amados, revístanse de compasión, de tierna misericordia, de bondad, de humildad, de mansedumbre, de tolerancia”

El que vive de la misericordia que fluye de la muerte y la vida de Jesús, como resultado de haber sido escogido por Dios; tiene el mandamiento de mostrar las virtudes de Él, para esto debe ponérselas, como un vestido, porque no son suyas, sino de Jesús, y actuar con compasión, misericordia, humildad, mansedumbre y tolerancia.

Colosenses 3:14 “Sobre todo esto vístanse del amor, que es el principio de la perfección”

También el amor divino, como se ve en Jesús crucificado, está disponible para los que viven de Su misericordia, a fin de que se vistan del amor inteligente, y amen a los caídos y equivocados, y sea bondadosos, tolerantes. En el ser íntimo del creyente este la lacra de la herencia de Adán, sin embargo, el amor divino puede marcar sus relaciones con los demás.

Colosenses 3:15 “Y la paz de Dios reine en sus corazones, a la cual fueron llamados en un solo cuerpo; y lleguen a ser agradecidos”  

La paz de Dios es la certeza de Su eterna compañía con el de la fe, porque en el que da importancia a la historia de Jesús, acabo el dominio del pecado con Su muerte, porque El llevo sus pecados en Su cuerpo a la cruz, también le mato a la ley al creyente, en su cuerpo, terminando así el poder del pecado en sus sentidos.

Colosenses 3:16 “Que la Palabra del Mesías habite en ustedes, abundantemente, en toda sabiduría, ensenándoles, reprobándoles a ustedes, con salmos, e himnos, cantos espirituales en gracia, cantando en el corazón de ustedes al Señor”

La Palabra se manifiesta en la presencia del Espíritu divino en los pensamientos, del que da importancia a la muerte de Jesús, así habita en el de la fe, y gradualmente extiende Su habitación a las variadas actividades de la mente; el Espíritu ensena, reprueba, usando diversas formas como salmos, himnos y canticos espirituales.

Colosenses 3:17 “Y todo lo que hagan en palabra, o en obra, háganlo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de El”

En los que Dios ha puesto Su palabra, o sea, les ha dado el relato de la historia de Jesús, o de sus enseñanzas son como Su brazo, porque por medio de ellos El hace obras de misericordia entre los hombres, entonces a través de ellos hace el bien, y esta es la razón para agradecer a Dios por el privilegio que les da.