Salmo 8:1-2:
“YHVH, nuestro Señor: ¿Cuán grande es tu nombre en
toda la tierra? ¿Has puesto tu esplendor aun sobre los cielos?
En la boca de los niños que maman pusiste tu fortaleza, para contestar las burlas de tus enemigos, y hacer cesar sus mofas, además de vengarte”
El salmista hace dos preguntas a Dios, preguntas que todo ser humano podría hacerlas, al
considerar la pequeñez del hombre frente al Dios todopoderoso. La
primera pregunta puede ser: ¿abarcan
tus actos de misericordia, de bondad, de clemencia, de perdón, de disciplina, a
toda la tierra, o solo al territorio de Israel? Esta pregunta no solo estaba en
la mente inspirada de David, sino parece
que era el pensamiento casi general, por ejemplo, cuando Dios le envió a Jonás
para predicar en Nínive, el no quiso ir, y huyo de
la tierra de Israel, creyendo que si iba al exterior, se alejaba de YHVH, porque
su autoridad como Dios era solo en la tierra de Israel.
La segunda pregunta del autor de este salmo es: ¿Tu
gloria, esta es: tu misericordia, tu bondad, clemencia, verdad, perdón y
disciplina también cubre el cielo? O lo que es lo mismo, ¿todos tus actos en el
cielo nacen de tu amor? La respuesta divina no se hizo esperar, y contesto, afirmativamente, estas dos preguntas con un ejemplo: cuando un niño tiene hambre, es porque necesita alimentos para su cuerpo, y llora para avisar a su madre que necesita lactar, a pesar que no es consciente de su incapacidad para suplirse a sí mismo, pero su madre sabe el significado de su llanto y le da su leche. Sin embargo, es Dios, quien da el alimento a la criatura, porque, por un lado, creo a las mujeres con glándulas que fabrican la leche, un alimento completo para los recién nacidos, por otro, les dio esta forma de comunicarse a los niños, para recibir el alimento de sus madres Este modo de alimentar a los bebes, es también para otras criaturas, los mamíferos, que al igual que los humanos están esparcidos por el mundo. Con este ejemplo, Dios muestra que ama a Sus criaturas, en forma práctica, supliendo las necesidades de todos, y llega su amor a los confines de la tierra.
Con este ejemplo se entiende que Dios muestra su fortaleza únicamente en actos que salen de Su amor.
Entonces, YHVH así acalla las burlas de sus enemigos, que dicen que no existe Dios, o que si existe es severo e inmisericorde.
Salmo 8: 3-8:
“Cuando contemplo los cielos, obra de tus dedos, la
luna y las estrellas que tu fijaste, pregunto: ¿Qué es el hombre para que le
recuerdes, el hijo de Adán, para que le
prestes atención? Le hiciste necesitado,
es decir más pequeño que Elohim, sin embargo le rodeaste de gloria y honor como
vestuario. Y le diste imperio sobre las
obras de tus manos; todo pusiste bajo sus pies: las ovejas, todo el ganado vacuno, aun sobre las bestias del campo, también sobre
las aves del cielo, y sobre los peces que viven en el mar.”
David vio el
cielo con atención, se fijó en sus detalles, y se dio cuenta del maravilloso
poder inteligente de YHVH, al mantener controladas y estables la luna y las
estrellas, a pesar que flotan en el espacio sin tener en que asentarse. Siglos atrás,
también Abraham al ver el cielo estrellado, comprendió, igual
que David, la sabía capacidad de Dios para mantener en orden las estrellas
suspendidas en la nada. Así mismo, el
salmista comprendió que la luna estaba puesta en el firmamento para
iluminar suavemente la tierra, es decir estaba al servicio de la humanidad, y
le surgió una pregunta, ¿Qué ve el Todopoderoso en el ser humano, que hizo su creación para servir al hombre? Aunque evidentemente le creo, no como si fuera dios, aún más, le hizo inferior, incluso a los ángeles, además le formo sujeto a necesidades; sin embargo le vistió de dignidad, y le doto
de habla, vista, inteligencia, imaginación, creatividad, capaz de tener afectos
y sentir emociones.
Y la respuesta a esa pregunta, seria: que Dios le creo
así, para que sea un canal de su amor, capaz
de ejercer autoridad, para que gobierne Su creación, copiando la forma como
Dios gobierna el universo. Así se lee en Gen 1:26 “Entonces dijo Elohim:
Hagamos al hombre a nuestra imagen , y gobierne a los peces del mar , a las
aves de los cielos , al ganado de toda la tierra y a todo reptil que repta
sobre la tierra” es decir , le hizo al hombre capaz de descubrir las
leyes y secretos de la naturaleza, para que pueda utilizarla para su
bien, al mismo tiempo que aprenda de esta: Que el principio de la vida en el universo es recibir, usar y dar. En otras palabras, el Espíritu Santo llevo la mente de David al pasado, a los escritos del Génesis, con el objeto que tenga presente que el propósito de Dios al crear al hombre fue para que gobierne los seres vivientes de la tierra, copiando el modelo divino.
Pero Adán no cumplió este objetivo, porque al someterse a satanás, cuando cayó en el Edén, perdió su responsabilidad, y esta fue a parar en satanás. Desde ese entonces no se puede ver la forma como gobierna Dios el universo, y se culpa a Dios por muchos males efecto del gobierno de satanás. Sin embargo, el salmista anticipa cómo será el gobierno de la naturaleza, en el milenio, gracias al sacrificio de Jesús, el Segundo Adán.
Así mismo, gracias a la salvación en Jesús, el de la fe puede, en el ámbito personal, familiar y en el del trabajo, hacer las tareas que Dios le dio, siguiendo la misericordia, la paciencia, la clemencia, el perdón, y de esta manera prepararse para cogobernar el mundo, cuando se instaure el reinado del Mesías, en el milenio. Apo. 20 20:4”…y vi a los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, ni habían recibido la marca en la frente y en la mano, y volvieron a vivir para reinar con el Mesías mil años, esta es la primera resurrección” Luc 19:15-17 “Después de recibido el reino, sucedió que el regreso y ordeno que llamaran a aquellos siervos a los cuales había entregado el dinero para saber cuánto había ganado cada uno. Llego el primero, diciendo: Señor tu mina produjo diez minas. Le dijo: ¡Bien hecho, buen siervo! Porque en lo muy poco fuiste fiel: ¡ten autoridad sobre 10 ciudades! Rom 8:20-21 “Porque la creación fue sometida al engaño, aunque no voluntariamente, sino por voluntad del que la sujeto, en la esperanza de que la misma creación será liberada de la esclavitud de la corrupción a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.”
Salmo 8:9
“YHVH, nuestro Señor,
cuan glorioso es tu nombre en toda la tierra”
La palabra gloria es difícil de entenderla, aparte de
la biblia, pero si toman en cuenta las referencias bíblicas de esta palabra,
llega a ser claro el sentido de este versículo. Por ejemplo, la petición de Moisés, de no llevar al pueblo escogido a la tierra de la promesa, a
menos que la presencia de Dios vaya con ellos; YHVH accedió a ese pedido de Moisés, entonces
el guía de Israel pidió a YHVH que le
haga ver su gloria, y resulto que la gloria de Dios es la forma como El derrama
su amor a sus criaturas. En otras palabras,
Su gloria es: su misericordia, su clemencia, su paciencia, su verdad, su
perdón, su disciplina, y su castigo. Exo 33:13-19, y 34:5-7. Por estos medios
llega el amor de Dios a las criaturas; así
se lee en: Mat 5: 16 “Así alumbre la luz de ustedes delante de los hombres a fin de que vean las
buenas obras de ustedes y den gloria al Padre de ustedes que está en el cielo”
Entonces tomando en cuenta el significado de gloria,
este versículo aclara que la tierra está llena de actos de misericordia, de
bondad, de perdón, es decir del amor de YHVH, derramado por medio de seres
humanos, y que muchas veces, estos ni siquiera saben que son el canal de Su amor.