lunes, 18 de julio de 2011

45. La Carta a los Hebreos. Cap. 11 pp.

Hebreos 11:1-2 “Ahora bien, la Fe es el principio básico de la esperanza, también es la convicción de lo que Dios ha hecho, aunque no se vea. Así mismo, es la causa por la que los antiguos fueron testificados”

La fe es un regalo de Dios que se mantiene activo por su amor, también es el origen en el que se asienta la esperanza, además la Fe crea convicción de las obras que Dios ha hecho en el pasado, pero que ahora no son visibles. Repito, la fe viva siempre va acompañada del amor que la vivifica, es decir el amor a, y de Dios hace que la Fe se muestre en obras. Además insisto, la Fe es el inicio de la esperanza, o sea con la fe empieza la seguridad respecto a las acciones futuras de Dios. Por lo leído, el amor, la fe y la esperanza siempre van juntos. Adicionalmente, Dios no deja sin testimonio su aprobación de la fe de una persona por medio de oraciones contestadas, milagros en la salud, etc. así hizo en el pasado con los personajes que vivieron la Fe que ahora nos sirve de ejemplo.

Hebreos 11:3 “Por la Fe comprendemos que el universo fue preparado por la palabra de Dios. Así que lo que es visible fue hecho de lo que no se ve”

Únicamente por la Fe podemos entender que Dios creo por medio de su palabra la energía, la materia, el espacio, el movimiento, el tiempo del universo. Al contrario, sin la Fe surgen todo tipo de teorías para explicar lo que existe, porque para entender la creación debemos recibir el regalo divino de la Fe. Se nota que la primera expresión de la Fe es la que nos permite entender que Dios hizo todo de la nada. También, resalta que esta fe no excluye el entendimiento, más bien actúa en la capacidad humana para comprender.

Hebreos 11:4-7 “Por la Fe, Abel se acerco a Dios con un sacrificio mas excelente que el de Caín. Y por su sacrificio recibió testimonio de que era justo, pues Dios le dio testimonio por medio de este. Y su Fe todavía habla de el, estando ya muerto. Por la Fe, Enoc fue trasladado para que no vea la muerte. Y desapareció porque Dios le traslado, pero aun antes de haber sido trasladado, recibió el testimonio de haber agradado a Dios, porque sin fe es imposible agradar a Dios, ya que es necesario que el que se acerca a Dios tenga Fe que El esta allí y que premia a los que le buscan (se acercan). Por la Fe, Noé cuando fue avisado de lo que nunca había sido visto, construyo un arca con temor, para la salvación de su casa.- Al construir el arca condeno al mundo, y llego a ser participante de la justicia que es según la Fe.”

El punto principal de la Fe de Abel es que el se acerco a Dios con un animal para sacrificarle, en obediencia a la indicación divina. No así Caín, quien sin hacer caso de la orden de Dios se acerco con los frutos de la tierra. La diferencia en el proceder de los dos hermanos esta en que Abel acepto que estaba bajo la misma condena mortal que Adán su padre, consecuencia de su caída, por esto se acerco con un animal sacrificado, O sea Abel comprendió que cuando Adán peco, toda su descendencia fue puesta bajo pecado y por lo tanto bajo la sentencia de muerte. Al contrario, Caín no acepto esa decisión divina, mas bien trajo a Dios los mejores frutos de la tierra. Esta es la razón por la cual la Fe de Abel complació a Dios, pero no la ofrenda de Caín.

Concerniente a Enoc, la referencia de Hebreos 11:5 esta en Génesis 5:22, 24 “Y Enoc anduvo con Dios… Y Enoc anduvo con Dios y desapareció porque Dios se lo llevo” La Fe de Enoc consistió en caminar con Dios. Ahora, la palabra hebrea halak traducida caminar, también se la usa para significar compañerismo, obediencia. Entones, de acuerdo a esta acepción, la Fe de Enoc consistió en obedecerle a Dios y así ser su compañero. En consecuencia, la obediencia y la compañía de Enoc agrado tanto a Dios que le llevo al cielo sin que sufra la muerte. Aquí amerita una pregunta ¿Puede el hombre pecador agradar a Dios? Respondo si, con la Fe. Bien, lo cierto es que Enoc vive ahora en el cielo. Por otro lado, Enoc será un ejemplo de los que obedecerán a Yeshua y caminaran con el, en el tiempo del fin, por esta razón Dios hará un cambio sobrenatural en ellos, parecido al que hizo a Enoc, este es mudarles a una nueva humanidad, tal como la que tiene Yeshua ahora, pero sin pasar por la muerte.

Continuo con Hebreos 11:7, Dios le anticipo a Noé el diluvio, cuando no llovía en la tierra. Porque cabe recordar que no siempre llovió en la tierra, así leemos en Génesis 2: 5, 6 “… Yahweh Dios no había enviado lluvia sobre la tierra…mas se levantaban de la tierra manantiales que regaban toda la superficie del suelo” esta es la causa por lo que en Hebreos 11:7 leemos “…Noé fue advertido acerca de lo que todavía no había sido visto en la tierra…” No había sido visto que agua caiga en la tierra como una ducha, tal como ocurrió en el diluvio. O sea Noé fue anticipado de un hecho futuro, el diluvio.- Dicho en otras palabras, Dios le profetizo a Noé el diluvio. Ahora, la Fe de Noé en la profecía del diluvio se manifestó al construir un arca para la salvación de su familia.

La Fe de Abel, Enoc y Noé fue acompañada del testimonio divino que ellos eran participes de la justicia de Dios. Ahora, la justicia de Dios puede ser comparada a una balanza cuyos dos platillos están en equilibrio, es como si en un platillo esta toda la humanidad puesta bajo el pecado de Adán, por un acto soberano de Dios. O sea es como si en el primer platillo esta la raza humana condenada a muerte en Adán. Si la balanza permaneciera así, este platillo estaría abajo y el otro arriba. O sea Dios no seria justo, Pero, la justicia divina es como si Dios pusiera, en el otro platillo, la vida perfecta sin pecado y la muerte en la cruz de Yeshua, resultado de su Fe. Pero Yeshua representa a toda la humanidad, tal como Adán. Así que ahora, es como si en el segundo platillo esta Yeshua y su Fe, el segundo Adán, esperando para recibir todo humano que le acepte.

lunes, 11 de julio de 2011

44. La Carta a los Hebreos. Cap. 10 up.

Hebreos 10: 19-23 “En consecuencia hermanos, teniendo la libertad para entrar al Santísimo en la sangre de Yeshua, quien inauguro para nosotros un camino nuevo en su muerte, pero al mismo tiempo es vivo, camino que atraviesa el velo, es decir su carne. Acerquémonos con corazón veraz, completamente seguros de la eficacia ( del Sumo Pontífice), teniendo nuestro corazón rociado, o sea purificada la mala conciencia, así mismo nuestro cuerpo lavado con agua pura. Aferrados a nuestro Sumo Sacerdote y a nuestro sacrificio, los cuales declaramos que nos pertenecen. Además, teniendo la esperanza firme porque fiel es el que nos prometió”

En los días que los creyentes hebreos recibieron esta carta, los servicios del Templo de Jerusalén todavía se celebraban día tras día, por esta razón esta carta era controversial, porque la misma inspiración que obro en Moisés para ordenar los servicios Templo actuaba en el escritor de esta carta, para instruir sobre el nuevo camino para acercarse a Dios.

Leemos que ahora, en la muerte de Yeshua podemos acercarnos y entrar en la presencia de Dios, porque ya hay el camino. Vale decir que el camino que debemos transitar al orar para llegar hasta el Altísimo es la humanidad herida y magullada de Yeshua, humanidad que era simbolizada por el velo que dividía el Santo del Santísimo del Templo. Por esta razón, nuestras oraciones deben ser francas y llegan a Dios por medio del Sumo Sacerdote, porque su muerte es nuestro camino al Padre. Por otro lado, también al acercarnos a Dios debemos ser sinceros, respetuosos y descansar en las virtudes de Yeshua, Sumo Pontífice, porque nuestra conciencia esta limpia, también gracias a su muerte. Además, Dios requiere que estemos físicamente aseados. Así mismo, nunca es mucho decir que tenemos el privilegio a ser atendidos por Dios porque el sacrificio de Yeshua es nuestro, ya que Dios nos lo obsequio como muestra tanto de su amor como de su justicia

Hebreos 10:24-29 “Además, prestémonos atención unos a otros con el fin de estimularnos para amarnos y para hacer buenas obras. Por esta razón, no dejemos de congregarnos, como algunos acostumbran, al contrario, exhortémonos, cada vez mas, para no pecar, al ver que el día se acerca. Porque si pecamos voluntariamente, después de recibir el conocimiento de la verdad, ya no hay sacrificio por los pecados, sino una horrenda expectación del juicio y del fuego ardiente que consumirá a los adversarios. Tengan presente, que si alguien viola la ley de Moisés muere sin misericordia, tan solo con la declaración de dos o tres testigos. Piensen Uds., cuanto mas severo será el castigo que merece el que ha pisoteado al Hijo de Dios, y ha tenido como común la sangre del pacto en la que fue santificado, y aun mas, ha insultado al Espíritu de gracia”

Es preciso que los creyentes se reúnan tanto para amarse fraternalmente, y animarse a practicar obras buenas, como para aconsejarse a no pecar ya que están cubiertos por el sacrificio y el sacerdocio de Yeshua. Estos versículos dan a entender que el Espíritu de Dios es el que habla a la conciencia para advertirnos de no pecar, pero a menudo lo hace por medio de los hermanos en la congregación. Por otro lado, el que peca con conciencia, no da valor al sacrificio de Yeshua, porque piensa que su muerte no tiene poder contra el pecado. Le recuerdo que uno de los oficios del Sumo Sacerdote es mantenernos sin pecado, por consiguiente, la advertencia a no pecar no esta basada en la invitación a luchar y esforzarnos personalmente para vencer en la tentación, sino a confiar en la obra permanente de Yeshua el Sumo Pontífice, que nos da el poder con el que venció toda tentación y nos cubre con su muerte. Esto explica la razón de la severidad del castigo que le espera al que peca voluntariamente.

Hebreos 10:30-31 “Porque conocemos al que dijo: Mío es el castigo, Yo castigare. Y otra vez dice: El Señor juzgara a su pueblo. ¡Es horroroso caer en las manos del Dios vivo!”

Dios pone a la disposición del hombre la salvación de gracia en Yeshua, salvación que es la expresión de su amor. Sin embargo, Dios castigara al que no recibe ni el poder que Yeshua uso para rechazar toda tentación, ni el poder que hay en su muerte, aunque el Sumo Pontífice esta listo a darnos estos poderes en cada tentación. No obstante, antes de castigar Dios someterá a juicio a su pueblo, para revelar al que no ha dependido de Yeshua para su salvación.

Hebreos 10: 32-39 “Ahora, recuerden los primeros días, cuando después de haber sido iluminados soportaron gran lucha y tribulación. Por un lado, fueron un espectáculo, tanto porque fueron reprochados como por las aflicciones, por otro lado, fueron compañeros de los que fueron tratados así. También tuvieron compasión de mis cadenas. Además, aceptaron con gozo el despojo de sus bienes, porque sabian que tienen una posesión mejor y más duradera en el cielo. Recuerden esto y no rechacen la libertad para orar, lo cual tiene gran recompensa. Por otro lado, el motivo de las luchas, aflicciones, despojos, y la necesidad de usar la libertad para orar es que deben soportarlas con energía a fin de que hagan la voluntad de Dios, y entonces reciban la promesa. Porque todavía un poco mas, y el que debe venir (el Mesías) vendrá y no tardara mucho. Por esto, mi justo vivirá de la Fe, pero si se acobarda y se apoca, mi alma no le aprueba. Por esto, nosotros no nos acobardamos, ni nos escodemos para perdición, al contrario somos de los que tienen fe para preservar el alma.”

Los miles de judíos que recibieron a Yeshua como el Mesías prometido, sufrieron luchas, persecución despojo de sus bienes, y algunos hasta la muerte. Pero estaban firmes en la fe y esperaban el retorno del Mesías con alegría, por esto resistieron con energía todas estas pruebas. En primer lugar, estos versículos aclaran que el propósito de estos sufrimientos es para que los creyentes aprendan a encararlos con coraje, porque para no pecar, o sea para obedecer la voluntad de Dios, se requiere también arrojo. En otras palabras, la fe siempre va acompañada de valentía, al contrario si el creyente se intimida y abate ante las pruebas, se aparta de la fe y peca. Entonces la lección es que resistamos con energía las tentaciones y sufrimientos, perseverando en oración basados en el sacrificio y sacerdocio de Yeshua. En segundo lugar, los judíos que recibieron a Yeshua como el Mesías de Israel, creían que su regreso para instalar el reino, estaba muy cerca, pero han pasado ya dos mil años, no obstante la inspiración no los decepciono, mas bien los alentó con estas palabras: “el que debía venir, vendrá y no demorara.”

lunes, 4 de julio de 2011

43. La Carta a los Hebreos Cap. 10 pp.

Hebreos 10:1-4“Porque la ley tiene la sombra de lo bueno que se espera, pero no tiene la representación exacta de la obra hecha. Por eso, cada año ofrecen los mismos sacrificios, que nunca pueden hacer perfectos a los que se acercan. Si este no fuera el caso, entonces no se ofrecerían mas dichos sacrificios, ya que los adoradores una vez purificados no tendrían pecados en la conciencia. Pero al contrario, cada año en esos sacrificios hay un recordatorio evidente de los pecados. Porque es imposible que la sangre de toros y machos cabríos quite los pecados.”

El contenido de la ley es como la proyección de la salvación, o sea el rescate del poder del pecado, la remisión de los pecados, la limpieza de la conciencia, la santificación y la obediencia a los diez mandamientos, vienen figurados en la ley, tanto en la obra de los sacerdotes como en los sacrificios del templo, o sea, la ley de los ritos es tan solo el perfil de lo bueno que se espera, pero, de ningún modo es la salvación misma. Por esta razón, año tras año se siguen ofreciendo dichos sacrificios, que no hacen perfectos, ni quitan los pecados, tampoco limpian la conciencia de los adoradores, pero si esta diseñada para darles una visión de la las obras del Mesías para su salvación.

Hebreos 10:5-9 “Por causa de lo anterior, al venir el Mesías a este mundo dice: Sacrificio y ofrenda no quisiste, por esto me has preparado un cuerpo. Además añade, tampoco apruebas los holocaustos por el pecado. Por esto dije:”Mira vengo para hacer tu voluntad !Oh Dios! (en el manuscrito del rollo esta escrito de mi). Ahora, fue dicho: sacrificios, ofrendas y holocaustos por el pecado no quieres, ni apruebas, sin embargo que estos se ofrecen según la ley. Así mismo, cuando dijo: Yo vengo para hacer tu voluntad ¡Oh Dios!, quito lo primero (los ritos), para afirmar lo segundo (el sacrificio de Yeshua)”

Estos versículos revelan el desagrado de Dios ante la forma como tomaron los israelitas la ley y sus enseñanzas. Como se indica arriba, el Altísimo niega todo valor salvador a los diversos sacrificios que la ley indica, porque esos ritos no pueden resolver el problema de la enemistad, desobediencia y rebeldía a Dios. En otras palabras, el pueblo de Dios no vio la ley como un instrumento pedagógico divino, que anticipa la obra del Mesías, sino creyó que era la solución divina para sus caídas. La incomprensión humana de la ley, motivo que el Mesías al entrar en este mundo revelara el desagrado de Dios por el equivocado entendimiento del sistema ritual. En consecuencia, dice: Sacrificio y ofrenda no quisiste, tampoco apruebas los holocaustos por los pecados, por esto me has preparado un cuerpo, y añade vengo para hacer tu voluntad ¡Oh Dios!, de esta manera da por terminado el sistema ritual, para dar lugar a su sacrificio.

Se puede afirmar que la mala comprensión de la ley fue la causa para que la mayoría del pueblo de Dios, incluyendo a sus dirigentes rechacen a Yeshua en la cruz..

Hebreos 10:10 “Hemos sido santificados en esa voluntad, es decir, mediante la ofrenda del cuerpo de Yeshua el Mesías, el cual se sacrifico una vez para siempre.”

La voluntad del Padre también es que por medio del sacrificio de Yeshua seamos santificados. Ser santificados significa estar tanto ligados, como cobijados por su Nombre, en otras palabras, otro de los efectos del sacrificio de Yeshua es que el nombre Yahweh sea una realidad en nosotros, esto es que seamos amados y podamos amar, recibamos compasión y podamos ser compasivos, que recibamos continuamente su misericordia y su verdad y que también seamos capaces de ser misericordiosos, además que seamos perdonados y podamos perdonar.

Hebreos 10:11-14 “En realidad esta establecido que todo sacerdote sirva cada día ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios que no pueden quitar los pecados. Pero El habiendo ofrecido para siempre un solo sacrificio por los pecados, se sentó a la diestra de Dios, permaneciendo expectante hasta que sus enemigos sean puestos bajo sus pies, porque por un solo sacrificio el ha perfeccionado para siempre, a los que han sido santificados.”

La función de los sacerdotes del antiguo pacto de ofrecer continuamente sacrificios de animales era legal, pero no quitaban los pecados, sin embargo servían para ensenar la necesidad del eficaz sacrificio y sacerdocio de Yeshua, el cual se ofreció una sola vez y quito los pecados y perfecciono para siempre a los que santifico. La perfección efecto del único sacrificio del Mesías, se entiende al considerar una semilla de maíz, La semilla muere y brotan raíces, después sale el tallo, y finalmente se produce fruto. En cada una de estas etapas hay perfección. Ahora, la perfección de los santificados es parecida, porque cuando el creyente alcanza la muerte al pecado, gracias a que esta cubierto por el sacrificio de Yeshua, entonces puede vivir la vida nueva,

Hebreos 10:15-17 “Además, el Espíritu Santo nos testifico, cuando antes dijo: Este es el pacto hare con ellos después de aquellos dice Yahweh: Daré mis leyes en sus corazones, y en su mente las escribiré, y de sus pecados e iniquidades no me acordare mas”

Estos versículos repiten a los judíos de la iglesia primitiva el pacto nuevo, para explicar que Dios no recordara más sus pecados, gracias a que el sacrificio único de Yeshua fue suficiente para quitar los pecados de los creyentes.

Hebreos 10:18 “Mas aun, donde hay remisión de estos no hay sacrificio por los pecados”

El afán de Dios es asegurar una y otra vez, que los pecados verdaderamente han sido remitidos por la muerte de Yeshua, por esto no tiene sentido otro sacrificio.