jueves, 27 de octubre de 2011

57. El Evangelio de Juan. Cap. 3 up.

Juan 3:22-25 “Después de esto Yeshua vino con Sus discípulos a la tierra de Judea, y estaba allí con ellos, y bautizaba.- Juan también bautizaba en Enon, cerca de Salim, porque allí había mucha agua. Y venían y eran bautizados. La razón por la que Juan bautizaba, es porque todavía no había sido puesto en la cárcel. Entonces surgió una discusión sobre la purificación, entre los discípulos de Juan y un judío. ”

Un poco tiempo después que Yeshua hablo con Nicodemo, salio de Jerusalén y se quedo con sus discípulos, cerca del Jordan, pero todavía en Judea, allí, los discípulos de Yeshua bautizaban. Cerca, Juan también bautizaba, porque estaba todavía en libertad. Entonces se suscitó una controversia, entre los seguidores del Bautista y un judío, tocante al grado de purificación alcanzada por el bautismo de Juan, y por el de Yeshua. Sobre este punto, cabe recordar que el bautismo de Juan era uno, entre los muchos ritos de purificación del Judaísmo.- Ahora, Yeshua ordeno que sus discípulos también practiquen esta misma purificación, con el propósito de empezar su obra desde el ultimo extremo de la de Juan.- En otras palabras, Yeshua al seguir bautizando, por un tiempo corto, con el bautismo de Juan, quería dar continuidad a la misión de Juan, con la suya. Por otro lado, el bautismo de Romanos 6 empieza a practicarse después que Yeshua regresa al Trono del Padre, y tiene un significado diferente al bautismo de Juan, porque simboliza la unión con la muerte de Yeshua, para que brote la vida nueva.

Juan 3:26-30 “Vinieron a Juan y le dijeron: Rabí, mira, Aquel que estaba contigo al otro lado del Jordan, de quien diste testimonio, esta bautizando, y todos van a El.- Juan les respondió: Ningún hombre puede recibir nada, si no le es dado del cielo. Ustedes mismos me son testigos de que dije: Yo no soy el Cristo (el Mesías), sino que he sido enviado delante de El. El que tiene la novia es el novio, además, el amigo del novio esta allí, y oye la voz del novio y se alegra en gran manera. Este es el motivo, por el cual mi gozo esta completo. Entonces es necesario que el crezca y yo disminuya.”

Los seguidores de Juan estaban convencidos que su maestro era enviado de Dios, pero estaban confundidos, porque Yeshua, de quien Juan dijo que era el Mesías, también bautizaba como el, por esto ellos supusieron que la obra del Maestro, ahora era bautizar, y ya no era la misión de Juan; además, el hecho que mucha gente iba donde Yeshua, ratificaba el raciocinio de ellos. Entonces fueron donde su maestro y el les contesto, primero, aclarándoles, que tanto la misión de el, como la de Yeshua nacen del Padre, segundo, les enfatizo que aunque el no era el Mesías, Dios le confío la misión de ir delante del Mesías, tercero, les describió la tarea del Mesías comparándola con su misión. Así, la obra de Yeshua le asemejo a la del novio, que toma a los que venían a bautizarse, como a una esposa. En este punto, le aclaro que los que venían a bautizarse lo hacían para purificarse y estar idóneos para recibir las enseñanzas del Mesías, y El los aceptaba y se hacia uno con ellos, no solo para darles sus instrucciones, sino para amarles, sostenerles y protegerles. Por otro lado, Juan compara su predicación y su bautismo a los Judíos, al rol del amigo del novio, según el matrimonio judío, que asiste a la novia hasta que sea tomada por su amado. Tan pronto la novia llega hasta el novio, el papel del amigo del novio disminuye, y el novio asume el primer rol.- Así fue el caso de Juan, que el entro en el ocaso, al mismo tiempo que Yeshua empezó a ser popular.

Juan 3:31-36 “El que viene de arriba esta por encima de todos, el que es de la tierra viene de la tierra y habla lo de la tierra. El que viene del cielo esta sobre todos. Y lo que El ha visto y ha oído, de eso da testimonio, no obstante nadie recibe su testimonio. Pero el que ha recibido su testimonio confirma que Dios es Verdad. La razón por la que Dios ha enviado a Aquel que habla sus palabras, es porque Dios da el Espíritu sin medida. Así mismo, el Padre ama al Hijo y ha entregado todas las cosas en sus manos. Bien, El que tiene Fe en el Hijo, tiene vida eterna; al contrario, el que no obedece al Hijo no vera la vida, sino que la ira de Dios permanece en el.”

En estos versos, Juan puntualiza la diferencia entre el Mesías y el, ya que los orígenes del Mesías y el de Juan son diversos, además, tantoYeshua como el anuncian el mensaje que el Padre les encomendó, sin embargo el mensaje del Mesías es el plan del Padre para salvar, que le mostró en el Cielo y mientras estaba en la tierra , en cambio, el de Juan es de cosas que son de la tierra, ejemplo, su bautismo y la reforma de la conducta de los Judíos. Por otro lado, todo el que toma seriamente la salvación queYeshua enseña, ratifica que el mensaje que trajo el Mesías es de Dios, porque en la misma persona, este se transforma en realidad. Así mismo, Juan en su explicación, añade que Dios le dio el mensaje salvador a Yeshua para derramar el Espíritu Santo,  por medio de las palabras que El enseñe. Después, nuevamente la inspiración releva que el amor del Padre a su Hijo es el motivo por cual Le dio todo para que salve al pecador. Finalmente, la fe OBEDIENTE en el Hijo, determina para quien es la salvación y la vida eterna.

jueves, 20 de octubre de 2011

56. El Evangelio de San Juan. Cap.3 pp.

Juan 3:1-8 “Había un hombre de los Fariseos, llamado Nicodemo, principal entre los Judíos. Este vino a Yeshua de noche y le dijo: Rabí sabemos que has venido de Dios como maestro, porque nadie puede hacer las señales que tu haces si Dios no esta con el. --Yeshua le contesto: En verdad en verdad te digo que el que no nace de lo alto, no puede ver el reino de Dios.
-Nicodemo Le dijo: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo ya viejo? ¿Acaso puede entrar por segunda vez en el vientre de su madre y nacer?
-Yeshua le respondió: En verdad te digo que el que no nace del agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios.- Lo que es nacido de la carne, carne es, y lo que es nacido del espíritu es. No te asombres de que te haya dicho: tienes que nacer de lo alto. El viento sopla por donde quiere, y oyes su sonido, pero no sabes de donde viene ni adonde va, así es todo aquel que es nacido del Espíritu”

Nicodemo era un importante Fariseo, porque además de ser miembro del Sanedrín, el consejo gobernante de los judíos, era el maestro principal de ellos. Con una posición tan elevada, no le convenía ir abiertamente a consultar a Yeshua, quien era un joven y poco conocido maestro, así que se fue cubierto en las oscuridad de la noche. Le saludo a Yeshua con respeto y alabanzas, el Maestro no agradeció ni contesto las alabanzas, sino que inesperadamente le revelo su mayor necesidad, que es también la de todo hombre, le dijo: Te aseguro que si no eres engendrado de lo alto no puedes VER el reino de Dios.
El engendramiento, en el mundo natural, es poner la semiente, o semen en el útero para que al unirse con la célula femenina de lugar a una nueva criatura, este proceso es un ejemplo para indicar el engendramiento de lo alto, que ocurre cuando Dios pone su semilla en el nuevo corazón de una persona. Esta experiencia sobrenatural, deja ver el Reino de Dios-El fariseo solo comprendió que se trataba de un engendramiento, pero no podía entender como podría suceder tal engendramiento, en otras palabras, como un hombre, como el, podía entrar en útero de su madre para nacer otra vez. Yeshua, en lugar de aclarar esta pregunta, continúo su revelación y le dijo: así como nueve meses después de la fecundación, nace una criatura; semejantemente después de un tiempo del engendramiento nace la criatura espiritual, del agua bautismal, por obra del Espíritu Santo. Desde ese momento hay dos criaturas, la natural que es carnal porque es nacida de la carne y la otra que es espiritual porque nace del Espíritu. Este punto Yeshua le explico mas, diciendo que no puede nacer de una criatura carnal un ser espiritual. O sea, para que ocurra el engendramiento de la criatura espiritual, es preciso que Dios cumpla su promesa de un nuevo corazón, que es el lugar de la nueva concepción. (Ezequiel 36:26 “Además, les daré un nuevo corazón…y les daré un corazón nuevo de carne”) Por esta razón, Nicodemo no debía escandalizarse de la revelacion de Yeshua. Por otro lado, Yeshua no avisa de que parte de lo alto viene la semilla divina, más bien compara la concepción y el nacimiento del nuevo ser, al viento, que únicamente se siente su efecto pero no se puede ver su origen.

Juan 3:9- 13 “Nicodemo le pregunto: ¿Cómo puede ser esto?
-Yeshua le respondió: Tú eres maestro de Israel, ¿y no entiendes estas cosas? En verdad en verdad te digo que hablamos lo que sabemos y damos testimonio lo que hemos visto, pero ustedes no reciben nuestro testimonio. Si les he hablado de las cosas terrenales, y no creen, ¿cómo creerán si le hablo de las cosas celestiales? Nadie ha subido al cielo, sino aquel que bajo del cielo, es decir el Hijo del hombre que esta en el cielo.”

Yeshua señala a Nicodemo como el maestro principal de los judíos. Por lo tanto, debía estar familiarizado con el nacimiento de la criatura espiritual, pero no sabe de esta experiencia, por esta razón, el y los judíos no prestan atención al relato de la experiencia del nacimiento espiritual, tanto de Yeshua, como de Moisés y los profetas; experiencia que ocurre en esta tierra. Además, hay otras vivencias en el cielo, cuyas revelaciones Nicodemo no esta en condiciones de recibir. Yeshua continúa explicando a Nicodemo su obra salvadora y le dice: Nadie ha subido al cielo, sino el Hijo del hombre que bajo del cielo. Esta última frase de Yeshua es para que Nicodemo, el maestro de Israel, recuerde Deuteronomio 30, que habla de la justicia por la Ley, que declara que si el pueblo de Israel vuelve a Dios para obedecerle en todo lo que ordeno, entonces será restaurado a la plena relación con El. Sigue y dice que el mandamiento es fácil, no esta fuera de su alcance, en el cielo, para que Israel diga: ¿Quién subirá por nosotros al cielo para hacernos oír, a fin de que lo cumplamos? Respecto a este punto Yeshua le avisa a Nicodemo que ya esta en vigor la Justicia por la Fe, por esto le dice: Nadie ha subido al cielo, sino el Hijo del hombre que bajo del cielo, para que nadie diga: ¿Quién subirá al cielo? con el objeto de hacer bajar al Mesías, porque Este ya bajo. En otras palabras, Yeshua le anuncia a Nicodemo que El es el Mesías prometido para iniciar la era de la justicia por la Fe, y que el mandamiento a Israel, de obedecer a Dios en todo, es tan solo una figura del Mesías. (Vea Rom. 10:6). O también, dicho en otra forma: Ahora, la obediencia requerida para la restauración de la relación con Dios esta en el Mesías, y el que quiera entrar en relación con Yahweh debe ser unido, por la Fe, al Mesías.

Juan 3:14-21 “Y como Moisés levanto la serpiente en el desierto, así es necesario que sea levantado el Hijo del hombre, para que todo aquel que tenga Fe en El, posea en El vida eterna. Porque de esta manera amo Dios al mundo: Dio a su Hijo unigénito, para que todo el que tenga Fe en El, no se pierda, sino que tenga vida eterna. Queda claro que Dios no envío a Su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por El. En consecuencia, el que tiene Fe en El no es juzgado, pero el que no tiene Fe, ya ha sido juzgado, porque no ha tenido Fe en el nombre del unigénito Hijo de Dios. Por otro lado, este es el juicio: La luz vino al mundo, pero los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus acciones eran malas. El motivo es que todo el que hace lo malo odia la Luz, y no viene a la Luz, para que sus acciones no sean expuestas. No así, el que practica la verdad viene a la luz, para que sus acciones sean manifestadas que han sido hechas en Dios.”

Ahora, Yeshua le explica a Nicodemo el engendramiento y nacimiento del ser espiritual, por medio de la historia de la serpiente de bronce, de Números cap.21. Sucedió cuando Israel viajaba por el desierto, que se quejo de Dios por las dificultades del viaje, El Altísimo respondió a las protestas quitando su protección, entonces las serpientes venenosas que rodeaban el campamento les atacaron, y mordieron a muchos, y empezó una gran mortandad. En esas condiciones, el pueblo pidió a Dios, por medio de Moisés, que suspenda el azote. Dios accedió su petición, e instruyo a Moisés para que haga una serpiente de bronce, parecida a las que atacaron a Israel, y la levante en un mástil, a fin de que todo el que la mire sea sanado. La serpiente de bronce levantada en el mástil figura a Yeshua crucificado, que igual que la serpiente de bronce representa a las serpientes que atacaron a los israelitas, así  El personifica a la raza humana bajo el poder del maligno. Vale reiterar que la serpiente en el mástil esta vencida, así mismo, en Yeshua crucificado, el cuerpo de pecado de toda la humanidad fue destruido. Aclarando este ultimo punto, Yeshua no muestra, en la cruz, la destrucción del pecado, sino del cuerpo que es el siervo del pecado. Es como si en lugar de destruir la maleza, se destruye el terreno donde crece la maleza. Adicionalmente, Yeshua hizo muy claro a Nicodemo que la vida, sale de la muerte. Se refiere a la vida que Da al que tiene FE en el crucificado, es decir, Fe en el que destruyo en si nuestro cuerpo que sirve al pecado, esto es, destruyo en El todo lo que de nosotros este sometido a la semilla que Satanás puso en Adán, y en toda la humanidad. También Yeshua le dejo claro a Nicodemo que Dios entrego a su Hijo a la muerte por su amor al mundo. El amor motivo a Dios a darnos el reglo de su Hijo. Por otro lado, es preciso tener presente este amor, para poder tener Fe en Yeshua.
Ahora un parentesis, respecto a los regalos, hay dos opciones, Una: aceptar. Otra: rechazar.- Así mismo, le recuerdo que todo regalo demanda una respuesta.
Siguiendo con el tema, Yeshua le reitera a Nicodemo que la razón por la que le envío el Padre no es para juzgar sino para salvar por amor. Ahora, la base para la salvación es la Fe, que a su vez es el fruto del amor del Padre. A continuación Yeshua le explica a Nicodemo, que cuando alguien esta satisfecho de su forma de ser, y de lo que hace, no le interesa oír la historia de la cruz, tampoco se interesa por valorar su forma de ser o lo que hace frente al sacrificio del Mesías. Por el contrario, el que no esta contento consigo mismo, o con sus acciones, viene al calvario, contento por que ha encontrado su salvación. Le recalco que todo el que se acerca a la cruz es traído por el Padre, por esto Yeshua nos dice que la obra de acercarse a la luz, es una acción en la que participan Dios y el creyente.

martes, 4 de octubre de 2011

55. El Evangelio de Juan. Cap. 2

Juan 2:1-5 “Al tercer día se celebro una boda en Cana de Galilea, y la madre de Yeshua estaba allí. Así mismo, Yeshua estaba invitado a la boda, junto con sus discípulos. Cuando les falto vino, la madre de Yeshua le dijo: No tienen vino. Entonces Yeshua le dijo: Mujer ¿que a mi y a ti? Todavía no llega mi hora. Y su madre dijo a los que servían: Haced todo lo que el os diga”

Se celebro un matrimonio en el pueblo de Cana, en la zona norte de Israel, llamada Galilea. Bien, María, Yeshua y sus recientes discípulos estaban invitados. Mientras estaban en los festejos, María noto que ya no había el vino. Sin embargo que ella no era parte de la familia, tomo como suyo este problema y le aviso a su hijo. La respuesta de Yeshua es sorprendente, porque se dirige a ella diciéndole: Mujer. Con este término se dirigía un extraño a una señora de respeto. Dicho de otro modo, Yeshua no se dirige a ella como un hijo a su madre, sino como a una persona de respeto. Además, le hace una pregunta retorica, ¿que parte me toca a mi y que parte te toca a ti, de este problema? refiriéndose la falta de vino. Así mismo, le añade: No ha llegado mi hora. Ahora, por el hecho que se dirige a ella con el termino “Mujer”, se nota que Yeshua separo su función de hijo, de la de Mesías. También se subentiende esto, cuando le pregunta ¿que parte me toca hacer a mí, como el Mesías, y a ti como invitada a la boda? En este punto, le indico que los invitados a las bodas asumían el proveer de vino o manjares en caso de necesidad.- Incluso, la Sinagoga, tenía un fondo para ayuda en las bodas de una pareja de pobres. Ahora, tocante al vino, Yeshua le aclara que todavía no ha llegado su hora, refiriéndose a su misión de derramar su sangre, simbolizada por el vino de la última cena, para sellar el Nuevo Pacto. Ahora, concerniente a María, ella comprendió que su parte era pedir a los sirvientes que hagan lo que Yeshua les pida, aunque ella no sabia que haría el Mesías.

Juan 2:6-11” Estaban allí seis tinajas de piedra para ser usadas en la purificación de los judíos, en cada una cabían dos o tres cantaros. Entonces, Yeshua les dijo: Llenen de agua las tinajas. Y las llenaron hasta el borde. Después les dijo, ahora saquen y llévenlo al mayordomo. Y ellos lo llevaron. Cuando el mayordomo probó el agua convertida en vino, sin saber de donde era; aunque los sirvientes que habían sacado el agua, lo sabían, entonces, el mayordomo llamo al novio y el dijo: Todo hombre, primero sirve el vino bueno, y cuando han tomado bastante, saca el de calidad inferior. No obstante, tú has guardado hasta ahora el buen vino. Este es el principio de las señales que Yeshua hizo, lo hizo en Cana de Galilea. Así manifestó su gloria, y sus discípulos creyeron en El.”

La parte que le correspondió hacer a Yeshua, como el Mesías prometido, le fue revelada por el Padre, y era crear vino, para que estén alegres los invitados a la boda, indicando que Dios quiere que los hombres sepan que El aprueba la alegría y el gozo para festejar la unión intima entre un hombre y una mujer. Le recuerdo, que el Creador hizo al hombre y a la mujer con las características masculina y femenina para que se complementen en el matrimonio. Así que, se entiende de esta señal, que dondequiera que haya una boda, Dios da los medios para que la festejen. Por otra parte, el vino que Yeshua creo , es el jugo de uva fermentado, o sea, es un vino con el grado alcohólico natural, que mas o menos es la mitad del grado alcohólico de los vinos que hoy se consumen.

Con este milagro “no piadoso” Yeshua hizo su primera señal, que indicaba su poder sobrenatural, como el Mesías de la promesa.

Juan 2: 13-17“Ahora bien, estaba cerca la Pascua de los judíos, y Yeshua subió a Jerusalén. Y encontró en el templo a los que vendían bueyes, ovejas y palomas, también encontró instalados a los que cambiaban dinero. Entonces haciendo un azote de cuerdas, expulso a todos fuera del templo, con sus ovejas y sus bueyes. Así mismo, desparramo las monedas de los cambistas y volcó sus mesas. Pero, dijo a los que vendían palomas: ¡Quiten esto de aquí! – No hagan de la casa de mi Padre una casa de comercio. Después, sus discípulos se acordaron que estaba escrito: El celo por tu casa me consumirá”

La ley ordenaba a todo israelita, dondequiera que viviera, que vaya Jerusalén, tres veces al año, para celebrar la Pascua, el Pentecostés y los Tabernáculos. (Lea Deuteronomio 16:16.) La Pascua estaba cerca, y Yeshua subió a Jerusalén, según el mudamiento. Cabe explicar lo siguiente, para entender lo que El hizo cuando llego al templo; por un lado, la ley de Dios, como hemos leído, ordenaba a todo israelita subir a Jerusalén, en estas tres ocasiones, con animales para el sacrificio y con el dinero del templo para pagar el rescate (Lea Éxodo 30:11-16). Por otra parte, como los judíos vivían dispersos en el imperio romano, era casi imposible traer los animales para el sacrificio, desde el lugar donde vivían hasta Jerusalén, así que para cumplir este mandamiento, los líderes de Israel les facilitaron vendiendo estos animales, en los patios del mismo templo. Además, para pagar el recate, instalaron mesas de cambio, para vender el dinero de Tiro a cambio del dinero romano, porque las monedas romanas tenían efigies paganas. El interés por adquirir, tanto animales a buen precio, como las monedas de Tiro, era tal que el patio de los gentiles era como un mercado común. Como resultado, las enseñanzas de los ritos del templo quedaban ocultas, es decir, no se podía discernir, por medio de estos, la misión del Mesías. En otras palabras, la obra de Yeshua quedaba desconocida y era muy difícil que el pueblo sea salvado. Así que, Yeshua limpio el templo, para que los ritos anticipen su sacrificio, así como su mediación, para llevar al hombre al Padre.

Juan 2:18-22 “Entonces los judíos le respondieron, y dijeron: Ya que haces estas cosas, ¿que señal nos muestras? Yeshua les respondió y les dijo: Destruyan este santuario y en tres días lo levantare. - Entonces los judíos dijeron: En cuarenta y seis años fue edificado este santuario, ¿y tú lo levantaras en tres días? Pero, el hablaba del santuario de su cuerpo. Por eso, cuando resucito de los muertos, sus discípulos recordaron que había dicho esto; creyeron en la Escritura y en la palabra que Yeshua había hablado.”

Le explico la relación entre la petición de los judíos y la señal que el Mesías les dio. Primero, el templo de los judíos es una figura, o una sombra de Yeshua, el verdadero Templo de Dios. Segundo, cuando Yeshua limpia el templo de Jerusalén, los judíos le piden una señal que indique su autoridad para tal acto, Yeshua les da su muerte y resurrección, como señal, porque con su muerte destruye el cuerpo de pecado, que como todo humano tenia, y resucita con un cuerpo puro, limpio. Es decir, El limpia el verdadero templo con su muerte y resurrección. En otras palabras, la limpieza del templo es una figura de su muerte y resurrección.

Juan 2: 23-25 “Cuando estaba en Jerusalén, durante la fiesta de la Pascua, por una parte, muchos tuvieron fe en su nombre, al ver las señales que hacia, pero, por otra parte, Yeshua no tenia fe en ellos, porque les conocía a todos, y no requería que alguien le diera testimonio del hombre, porque El sabia lo que había en el hombre.”

Muchos vieron las señales que hizo en la Pascua, y tuvieron fe en que Yeshua es el Mesías. Sin embargo El no tuvo fe en ellos, porque les conocía, sin necesidad que alguien le dijera. Ahora bien, Alguien preguntara, ¿Por qué Yeshua no cree en los que tuvieron Fe en El? La respuesta es que la Fe viene por el oír la Palabra, y no por ver señales, y ellos creyeron por las señales y no por la Palabra. Ahora, recuerde que la semilla de Satanás esta en todo hombre, solo cuando Dios pone su semilla, que es su Palabra, se cimenta la unión con El, y esta es la fe Bíblica. Surge otra pregunta ¿Entonces, que objeto tienen las señales? Creo que son para atraer la atención hacia Yeshua.

Nota. El capitulo tres de Juan detalla la relación de Fe.