La ley del matrimonio tiene el poder y la autoridad para UNIR a un hombre con una mujer, mientras los dos están vivos. En el caso que muera el marido, entonces acaba el poder y la autoridad de la ley del matrimonio sobre la viuda.
Romanos 7:3 “Así que la mujer será llamada
adultera, si estando vivo su marido, se une a otro hombre, pero si el marido
muere, está libre de la ley, y no es adultera si se casa con otro hombre”
Al
citar lo que es evidente de la ley del matrimonio, Pablo quiso hacer entender “la
función” de UNIR o Atar de los 10 mandamientos. Así, la esposa representa al
ser humano, el marido representa al pecado. La ley que los une representa a los
10 mandamientos.
Romanos 7: 4 “Así que hermanos míos, también
ustedes fueron muertos a la ley, por medio del cuerpo del Mesías, para que
lleguen a ser unidos a otro, al que resucito de los muertos, a fin de llevar
frutos para Dios”
Al
aceptar llevar los pecados de la humanidad Jesús se hizo pecado, y fue
simbolizado por el esposo en la comparación que hizo Pablo de los 10
mandamientos con la ley del matrimonio. Así que Jesús al morir, murió a la ley,
y en El fueron muertos a la ley los creyentes, para formar una unidad con El.
Romanos 7:5 “Porque cuando estábamos
en la carne sufríamos el pecado, que era activado en nosotros por medio de la
ley, para llevar frutos de muerte”
Estar
en la carne es vivir discerniendo el bien del mal, teniendo como norma para
este discernimiento los 10 mandamientos; porque satanás usa los 10 mandamientos
para hacer activo al pecado, a fin de esclavizarnos al odio, orgullo, envidia,
codicia, concupiscencia, etc.
Romanos 7:6:” Pero ahora que hemos
sido liberados de la ley, al haber muerto a la (ley) que nos ataba, para que
sirvamos con Espíritu nuevo y no con el escrito antiguo”
Jesús
murió por lo menos con dos objetivos, uno llevar nuestros pecados, para que
estemos inocentes ante Dios, y otro para matarnos a la ley, a fin de que no
sigamos unidos al pecado; entonces nos guie el Espíritu Santo, y seamos canales
de la misericordia divina a los que nos rodean.
Romanos 7:7 “Entonces ¿Qué diremos?
¿La ley es pecado? NO, porque yo no conocería el pecado si no fuera por la ley.
Porque no conocería la codicia, si la ley no dijera “No codiciarás”
Hay
que saber que “conocer” en el antiguo testamento es tener una relación íntima,
como la del matrimonio, y que “codicia” es todo deseo sin control. Entonces
porque la ley ordena “No codiciar” el hombre esta “unido” como en matrimonio,
sujeto a los deseos sin control.
Romanos 7:8: Pero el pecado se aprovechó
del mandamiento, y produjo en mi todo tipo de codicia. Porque sin la ley, el
pecado está muerto”
Dios
le revelo a Pablo que los diez mandamientos dan vida al pecado; por esto el
escribe: Sin la ley el pecado está muerto. El pecado permanece oculto en la
mente humana, por eso es necesario que la ley lo haga activo y el hombre lo
descubra, a fin de que se vea esclavo del pecado, y necesite a Jesús el
Salvador.