sábado, 28 de mayo de 2016

4. El Evangelio del Amor.

 Romanos 2:1 “Por lo dicho, todo hombre que juzga es sin escusa. Porque quien juzga a otro, a  el  mismo se condena, ya que el que juzga hace lo mismo que condena”
El pecado separo a todo hombre de Dios, y degrado moralmente  a todos. En otras palabras todos son pecadores, por esto Jesús dijo “el que este sin pecado lance la primera piedra” Esta es la razón para que nadie condene o desprecie a su prójimo, porque se condena a sí mismo.

Romanos 2:4 “No valoras la riqueza de Su bondad, tolerancia y paciencia, e ignoras que la bondad de Dios te guía al arrepentimiento”
Se pregunta: ¿Si todos somos pecadores por la caída de Adán, porque algunos no son tan malos como otros?  La respuesta es: La misericordia y la compasión de Dios ha protegido de más males a unos más que a otros. Entonces en lugar de juzgar a los más malos, los menos malos agradezcan a Dios por Su tolerancia  paciencia y bondad que ha puesto interés en ellos para oír con atención la historia de Jesús.

Romanos 2:13 “Porque no son los oidores de la ley los justos ante Dios, sino los que cumplen la ley serán justificados”
Los que siguen el camino de la ley piensan que lo Dios espera del hombre es que acepte los 10 mandamientos como norma de vida, y que cualquier fallo se arregla con el perdón. Esto es equivocado, porque no son los que oyen la ley, sino los que la obedecen perfectamente los que recibirán el perdón, o sea serán justificados. En otras palabras, la confesión no es el requisito para el perdón, sino la obediencia perfecta.

Romanos 2:29 “El judío es en lo interno, y la circuncisión es en el corazón, por medio del Espíritu, y no es escrita. El hombre no alaba la circuncisión  del corazón, pero  Dios si”
El judío, es decir el pueblo de Dios es en la mente, por esto su identidad no es la circuncisión física, sino la circuncisión del corazón, o sea es el corte hecho en la mente por el Espíritu, que separa lo espiritual de lo carnal. Otro punto, la separación hecha por la circuncisión física, separa tejidos, pero además separa a los judios de los gentiles, por esto se alaban los judíos, pero Dios no los alaba.

Romanos 3:1 “Entonces, ¿cuál es la ventaja del judío? O ¿Cuál es el utilidad de la circuncisión?”  
A pesar de la circuncisión física, y del hecho ser de la raza judía, el judío también es víctima del pecado como el gentil, y ambos necesitan de la remisión de pecados que Jesús llevo a cabo en su cuerpo crucificado. Entonces ambos, judíos y gentiles necesitan de la misericordia y compasión del Padre.

Romanos 3:2 “Mucho, en todo sentido. Lo principal es que a ellos les fueron confiadas las palabras de Dios”
Judíos y gentiles necesitan de la misericordia de   las palabras de Dios, la Biblia. Es decir a ellos fue confiado el plan de Dios para terminar en el mundo el pecado, la enfermedad, la miseria y la muerte, y unirle a Él.    

Romanos 3:3 “Pero algunos judíos fueron incrédulos ¿Entonces es posible que su incredulidad anulara la fidelidad de Dios?
Dios no depende de las virtudes humanas para hacer el bien que ha prometido; porque Dios está ligado a sus promesas como un esposo fiel a su esposa;  por eso Israel sigue siendo el pueblo de Dios, a pesar de que los judíos incrédulos no quisieron aceptar el amor de Dios derramado por medio de Su Hijo, sino prefirieron caminar bajo la ley.

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