Los cristianos de Roma mayormente eran judíos que habían aceptado que Jesús era el Mesías, pero seguían practicando el judaísmo. Por esto el afán de Pablo para ensenarles la buena noticia de que se había establecido la comunión con el Padre, gracias al sacrificio de Jesús. Es decir los hombres tenían acceso a la fuente del amor para salir de su degradación moral, y vivir en amor.
Romanos 1:16 “Porque
no me avergüenzo del evangelio, porque es el poder de Dios para salvación de
todo el que tiene fe, primeramente del Judío, y también del Griego”
El apóstol afirma que no esconde el relato de los hechos de
la vida de Jesús, porque en ese relato esta la autoridad del Todopoderoso para
librar del poder del pecado y darle el Espíritu Santo, a todo el que preste atención
esta buena noticia, sea Judío o Gentil.
Romanos 1:17 “Porque
en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe; como está
escrito: Mas el justo por la fe vivirá”
Al oír con fe el
relato de la vida de Jesús se ve la justicia de Dios. En otras palabras, en la
historia de Jesús se revela como compenso Dios el hecho, que cuando cayó Adán,
la humanidad, que todavía no nació, fue hecha pecadora; porque se lee en esa
historia que Dios descargo en Jesús los pecados de todos, por eso fue el Cordero
que lleva el pecado del mundo, y así limpio de todo pecado a los hombres.
Romanos 1:18 “Por
otro lado, la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e
injusticia de los hombres que con injusticia detienen la verdad”
Desde otro ángulo, Dios se indigna porque se quiere limpiar
la maldad humana con métodos humanos, ocultando con impiedad e injusticia el
método divino que es que en la sangre de Jesús, Dios lavo toda maldad. Además así se desconoce que la maldad de los hombres
es el fruto de haber sido apartados de Dios, cuando Adán cayó.
Romanos 1:19 “Así que
lo que se conoce de Dios es evidente en ellos, porque se lo hizo evidente”
El hombre perdió la comunión con Dios desde que Adán peco, y
desde entonces el Padre es un desconocido para todos, pero en la naturaleza
Dios muestra que Él quiere el bien de la humanidad. Por esto se ve que esta
sirve para el bien del hombre, el sol para la vida, la lluvia para regar los
campos, las flores para la alegría, y
las maravillas del cuerpo; todo esto habla que Dios busca el bien del
hombre.
Romanos 1:20 “Porque
desde la creación del mundo, se han visto con claridad sus atributos
invisibles, su eterno poder y divinidad, o sea por lo que ha hecho han sido
entendidos sus atributos; de manera que no tienen excusa”
Dios es un espíritu, es decir solo hay como verle en lo que
ha hecho, por otro lado Dios es Amor, o sea en sus obras están las expresiones
de Su amor, y una de estas expresiones es compartir. Esto se ve en la creación.
Por ejemplo la lluvia; riega los campos, alimenta los ríos y el océano, el que comparte su agua con la
atmosfera para formar las nubes y así sigue el ciclo de compartir.
Romanos 1:21 “A pesar
de que conocieron a Dios, no le dieron honra como a Dios, ni le agradecieron, sino
que se hicieron idolatras en sus pensamientos, entonces fue oscurecido su necio
corazón”
Los humanos no valoraron la revelación de Dios que da la
naturaleza, por eso en lugar de honrarle como a Dios, desconocieron Su
existencia. El fruto de este error fue la idolatría; así mismo perdieron la
capacidad de razonar bien. Por otro lado, Dios puso en la creación ejemplos de
servicio abnegado para que los hombres Le conozcan y sean protegidos de la
idolatría y de la degradación moral.
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