Romanos 1:23 “Y
cambiaron la gloria del Dios incorruptible por una estatua de hombre
corruptible, o de ave, de cuadrúpedos, o
de reptiles”
Dios es un espíritu es decir no tiene un físico, por esto
solo hay como conocerle por lo que hace. Por otro lado la gloria de Dios son
sus obras en la creación. La naturaleza aun refleja expresiones de Su amor, a
pesar de las deformaciones que sufrió esta desde que Adán cayo, y de las causadas
por el hombre. Por esto no tiene sentido
hacer representaciones materiales de Dios.
Romanos 1:24 “Por
esta razón, Dios les entrego en los apetitos sin control de sus corazones, y
deshonraron sus cuerpos entre sí”
La degradación moral del hombre, separado de Dios por la
caída de Adán, empezó por la idolatría. Por la idolatría Dios tuvo que retirar de la mente del hombre Su influencia, entonces
quedo sometido a apetitos y pasiones.
Por otro lado, la razón para revelar detalles de la caída de la humanidad es
para que sepa que separada de Dios se corrompe, entonces necesite y valore la
amistad y unión que Dios le ofrecerá.
Romanos 1:26 Por esto
Dios les entrego a emociones degradantes que les deshonraron, por esto sus
mujeres cambiaron por algo parecido al instinto natural en el acto sexual”
Después, los hombres
pasaron a servir y a rendir culto a criaturas, por esto el Creador aparto Su
influencia y quedaron sujetos a pasiones corrompidas, y sus mujeres hicieron
variaciones vergonzosas en el acto sexual. Así que a medida que el hombre se
separaba más de Dios, sus deseos naturales se corrompían. Por esta razón la misión
de Jesús es unir al hombre a Dios.
Romanos 1:27 “De la
misma manera, los hombres dejaron el instinto sexual hacia la mujer, y se
encendieron en lujuria unos con otros, varones con varones hicieron hechos
vergonzosos y recibieron en sí mismos el
pago de su extravío”
El fruto de dar culto a criaturas y no a Dios es la
desviación sexual en hombres y mujeres. Es decir el origen de estos males es
espiritual. Por otro lado, Dios envió a Su Hijo para traer al hombre a Él. O
sea que Jesús vino como el Cordero que
se hizo cargo de todos los pecados, y los venció en la cruz, porque no
pudieron apartarle del Padre, a fin de que
todo el que tenga fe en El, sea unido al Padre, al Amor.
Romanos 1:28 “Y como
no tuvieron a bien reconocer a Dios, Dios les entrego a ellos a una mente
depravada, para que hagan lo que no es correcto”
Este verso ensena que el pecado es malo, no porque rompe la
ley, porque todavía la ley no había sido promulgada en el Sinaí, sino porque no
reconoce y rechaza a Dios. Recordando
que Dios es Amor, el pecado desconoce el amor, aún más rechaza todo lo que es
misericordia, compasión y bondad; y como resultado de esto es la perversión.
Romanos 1:29-31
“Llenos de toda injusticia, fornicadores, maliciosos, avaros, depravados,
envidiosos, peleadores, engañadores, mal genios, calumniadores, odiadores de
Dios, orgullosos, alabanciosos, injuriosos a los padres, sin entendimiento,
desleales, sin afectos naturales…”
Cada generación humana ha menospreciado a Dios; y hoy la
humanidad sufre esta cadena de males, por igualmente, no prestar atención a la
historia de Jesús, en la cual está la mayor revelación del amor de Dios y del
perdón gratuito a todos de esta cadena de males.
Romanos 1:32 “Estos a
pesar que conocen la sentencia de Dios, que los que practican estas cosas son
reos de muerte, no solo las hacen sino que se unen en compañerismo con los que
las practican”
El castigo para el pecador es la muerte, sentencia que se
cumplirá en el juicio final. Por otro lado, el pecador es libre de esa pena al
prestar atención a la historia de Jesús, especialmente a la de Su muerte.
Porque en el Getsemaní Dios puso en
Jesús los pecados de la humanidad, y El venció la maldad del pecado en la cruz, porque no pudo apartarlo
del Padre y murió, así Dios libro al hombre de sus culpas. 
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