jueves, 15 de diciembre de 2011

63. El Evangelio de Juan. Cap.6:22-45

Juan 6:22-24 “Al día siguiente, la multitud que había quedado al otro lado del mar se dio cuenta que allí no había mas que una barca, y que Yeshua no había entrado en ella con sus discípulos, sino que sus discípulos se habían ido solos.- Vinieron otras barcas de Tiberias, cerca del lugar donde habían comido el pan después que El Señor había dado gracias. Y cuando la gente vio que Yeshua no estaba allí, por lo tanto, subieron a las barcas y se fueron a Capernaun buscando a Yeshua.”

La multitud se desanimo cuando Yeshua no dejo que le hagan rey por la fuerza; por este motivo muchos regresaron a sus hogares, y otros continuaron su viaje a Jerusalén para la Pascua. Los que quedaron vieron que solo los discípulos se subieron a la barca, pero no sabían donde estaba Yeshua, por esto se fueron al otro lado del lago, a Capernaun.

Juan 6:25-27 “Cuando Lo hallaron al otro lado del mar, Le dijeron: Rabí ¿Cuándo llegaste acá? Yeshua les respondió: En verdad les digo, que me buscan, no porque hayan visto señales sino porque han comido los panes y se han saciado. Trabajen, no por el alimento que perece, sino por el alimento que permanece para la vida eterna, el cual el Hijo del Hombre les dará, porque a El Dios el Padre le ha sellado.”

La gente tenia curiosidad por saber como y cuando Yeshua vino a Capernaun, pero El no satisfizo su curiosidad, mas bien , les dijo que la señal de los panes y los peces era para que le identifiquen como el Mesías prometido- al principio ellos así lo hicieron- pero después ya no pensaron que Yeshua era el Mesías, esto es cuando no se dejo poner como rey de Israel; a pesar de esto, todavía Le buscaron para aprovechar de otro milagro, pero no para ser ensenados por El.- Luego Yeshua les revelo la función que El Padre le encargo : darles el alimento para la vida eterna; y les amonesto para que se ocupen de buscar este alimento. Como se ve, Yeshua dice que hay dos alimentos: el que perece y el que da la vida eterna.

Juan 6:28-31 “Entonces le preguntaron: ¿Qué debemos hacer para poner en practica las obras de Dios?
-Yeshua les respondió, esta es la obra de Dios: que tengan Fe en el que El envió.
- Le dijeron entonces: ¿Qué haces tú como señal para que veamos y tengamos Fe en ti? ¿Qué obra haces? Nuestros padres comieron el mana en el desierto, como esta escrito: Les dio a comer pan del cielo”

Tan pronto oyeron que Yeshua les dijo que busquen el alimento para vida eterna, le dijeron ¿en que debemos ocuparnos para hacer las obras de Dios? Porque relacionaron la búsqueda del pan de la vida del cielo con la obra de Dios. Entonces Yeshua les aclaro que Dios trabaja para que tengan Fe en El. A pesar de esto, ellos le pidieron una señal para tener Fe en El. Y justificaron su pedido con el argumento que sus antepasados creyeron a Moisés porque el les dio el mana, como señal que Dios por sus virtudes le aprobó.

Juan 6:32-34 “Entonces Yeshua les dijo: En verdad les digo, no es Moisés el que les ha dado el pan del cielo, sino es mi Padre El que les da el verdadero pan del cielo.- Porque el pan de Dios es el que baja del cielo y da vida al mundo. Entonces le dijeron: Señor, dadnos siempre ese pan”.

La señal que ellos le pidieron era un pan temporal como fue el mana, pero Yeshua les corrigió, diciéndoles que Moisés no tenia el encargo de Dios de darles el pan que trae la vida del cielo a la tierra, sino que el Padre encomendó esta tarea a Yeshua . Ante esta aclaración, ellos le dicen, dadnos siempre ese pan.

Juan 35-40 “Yeshua les dijo: Yo soy el pan de la vida; el que viene a Mi nunca tendrá hambre, y el que tiene Fe en Mi nunca tendrá sed.- Pero ya les dije que aunque me han visto no tienen Fe. Todo a quien el Padre me da, vendrá a Mi, y al que viene a Mi de ningún modo lo echare fuera.- Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que Me envió.- Y esta es la voluntad del que Me envió: que de todo lo que El Me ha dado Yo no pierda nada, sino que lo resucite en el día final.- Porque esta es la voluntad de Mi Padre que todo el que ve al Hijo y tiene Fe en El, tenga la vida eterna, y Yo lo resucite en el día final”

Así que cuando le piden el pan del cielo, El les revela que El es el pan de la vida eterna. Es decir, Su persona imparte la vida de Dios cuando es recibida, esto es parecido al efecto del pan temporal en alguien que lo come.- Añade que el que recibe estas enseñanzas con Fe, o sea sintiendo que se refieren a el mismo, nunca sentirá necesidad de algo diferente, porque estará satisfecho. Pero entonces, Yeshua les reclama, porque a pesar que han visto sus obras y han oído sus enseñanzas, no tienen Fe en El.- Luego el Maestro les indica que el venir a El, o sea recibir sus enseñanzas, es el resultado del trabajo del Padre en una persona, por eso Yeshua se hace responsable de que esa persona no se pierda, y por ningún motivo la rechaza.- Yeshua reitera que se siente obligado a resucitar de entre los muertos a esa persona, porque esto es lo que Su Padre quiere, ya que El acepto venir a este mundo para hacer Su voluntad .- A continuación da mas detalles de lo que el Padre quiere, dice :Todo el que ve al Hijo y tiene Fe en El recibe, ahora, el pan de la vida del cielo, y en el fin del mundo será resucitado. Aquí es preciso aclarar lo que significa ver a Yeshua.- La palabra griega de este pasaje es “theoreo” que significa ESPECTAR, CONSIDERAR LOS DETALLES, parecido a meditar, en cambio la palabra “blepo” indica ver físicamente, y por supuesto no esta en este versículo.- Por lo tanto, el que medita en los detalles de la vida y la muerte de Yeshua, y reconoce que es para su beneficio, El le da Su Espíritu, es decir el Espíritu de Cristo, el Hijo del hombre -por este motivo tiene derecho a la resurrección-

Juan 6:41-45 “Los Judíos murmuraban por lo que El dijo: Yo soy el pan que descendió del cielo, y decían: ¿No es este Yeshua, el hijo de José, cuyo padre y madre nosotros conocemos? ¿Cómo es que ahora dice: Yo he descendido del cielo?

-Yeshua les dijo: No murmuren entre ustedes.- Porque nadie puede venir a Mi si no lo trae el Padre que Me envió, y Yo lo resucitare en el día final.- Porque esta escrito en los profetas: Y todos serán ensenados por Dios.- Así que todo el que ha oído y aprendido del Padre, viene a Mi”

La objeción de los judíos a las palabras de Yeshua era que conociendo, como conocían a Su familia, ¿como puede decir: Yo he descendido del cielo? Pero Yeshua les pide no murmurar y les explica que para aceptar sus enseñanzas necesitan la preparación previa, que es oír y aprender lo que El Padre dijo de Su obra, como el Mesías- enseñanza que esta registrada en los cinco libros de Moisés y ampliada en los Profetas, o sea en el Antiguo Testamento- Note que esta verdad trascendental la reitera varias veces en este Evangelio- si no la recuerda, lea los últimos versículos del capitulo cinco del mismo- Esta revelación señala que la salvación, es decir la obra de Yeshua para su beneficio, siempre va precedida del trabajo Del Padre para guiar a investigar las figuras y sombras del Mesías en el Antiguo Testamento, con el fin de comprender con claridad la misión de este, es decir para entender las verdades del Nuevo Testamento.

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