Juan 11:1-3. Estaba enfermo cierto hombre, llamado Lázaro, de Betania, la aldea de María y de su hermana Marta. María, cuyo hermano Lázaro estaba enfermo, fue la que ungió al Señor con perfume y le seco los pies con sus cabellos. Entonces, las hermanas enviaron a decir a Yeshua: Señor, el que Tu amas esta enfermo.”
Lázaro era hermano de María, a quien Yeshua perdono, cuando ella le perfumo la cabeza y lloro a sus pies, mientras estaba en la casa de un Fariseo. Desde ese entonces, Yeshua era amigo de esa familia, que incluía también a Marta. Por esto, cuando Lázaro enfermo, ellas estaban convencidas de que Yeshua podía curarle, gracias a Su unión con el Padre, y además sabían donde se hallaba Yeshua con sus discípulos, por esto le mandaron un mensaje: Señor, Tu amigo esta enfermo.
Juan 11:4-10 “Cuando Yeshua oyó, dijo: esta enfermedad no es para muerte, sino para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por medio de ella. Note que Yeshua amaba a Marta, a su hermana y a Lázaro. Sin embargo, cuando oyó que Lázaro estaba enfermo, se quedo dos días más en el lugar donde estaba. Pero después de eso, dijo a sus discípulos: Vamos de nuevo a Judea. Los discípulos Le dijeron: Rabí (Maestro), hace poco que los judíos te querían apedrear, ¿y vas allá otra vez? Yeshua respondió: ¿No hay doce horas en el día? Si alguien anda de día no tropieza, porque ve la luz de este mundo. Mas, si alguien anda de noche, tropieza, porque la luz no esta en el”
Yeshua indica que, no obstante que la enfermedad es un instrumento de la muerte, sin embargo, el mal de su amigo servirá para mostrar que Dios es El que da vida, y que Yeshua es su brazo ejecutor.
Por otro lado, Yeshua amaba con amor divino a estos hermanos, aunque ellos solo le estimaban como amigo y bienhechor, pero aun así, se quedo dos días más donde estaba, para que el poder de vida de Dios se manifieste. Por esto, después que Lázaro muere, les dice a sus discípulos: vamos a Betania.
Ahora, tocante a la decisión del Maestro, los discípulos recordaban vívidamente que los judíos quisieron apedrearle cuando Yeshua les revelo que el Padre y El eran UNO; por esto, cuando les dice que deben partir, le recuerdan el peligro al que se expone. Pero el Maestro les indica que cuando se hace la voluntad del Padre es como andar de día, en caso contrario, cuando se hace la voluntad propia, se fracasa, porque es como andar de noche. En otras palabras, los intentos humanos en su contra fracasaran, mientras haga las obras que el Padre le mando hacer.
Juan 11: 11-16 “Dijo esto y después añadió: Nuestro amigo Lázaro se ha dormido; pero voy a despertarle. Entonces, los discípulos Le dijeron: Señor si se ha dormido, se recuperara. Yeshua había hablado de la muerte de Lázaro, pero ellos creyeron que hablaba literalmente del sueño. Pero, por esto Yeshua les dijo claramente: Lázaro ha muerto, y por causa de ustedes me alegro de no haber estado allí, para que tengan fe; por este motivo, ahora, nos vamos donde esta el. Entonces, Tomas, llamado el Gemelo, dijo a sus condiscípulos: Vamos, también nosotros para morir con El.”
A continuación Yeshua les avisa, en forma progresiva, a sus discípulos, la muerte de Lázaro. Primero se refiere a la muerte como el sueño, entonces los discípulos piensan que si Lázaro ha podido quedarse dormido, es señal que sanara de su enfermedad. Pero lo que Yeshua quiere enseñarles es que la muerte de los creyentes, es comparable al sueño, porque los que duermen despiertan, así los creyentes muertos volverán a vivir. Segundo, Yeshua completa esta comparación y les habla ya, literalmente, de la muerte de Lázaro.
Un punto que admira es que la muerte de Lázaro es causa de alegría para Yeshua, alegría, porque les ayudara a sus discípulos a tener Fe, en dos puntos, uno: en que El tiene poder para dar vida a los muertos; dos: en que la salvación culmina con la resurrección. Resalta que Yeshua da mas valor a la Fe que al periodo de vida en este mundo, que invariablemente termina con la muerte, como será la experiencia de Lázaro, que aunque Yeshua le resucite, volverá a morir. O sea que Yeshua, con su alegría, ante la muerte de Lázaro, deja ver que la Fe es de mas valor que esta vida, porque abre el camino a la resurrección, para la eternidad.
Ante ese viaje, Tomas, uno sus discípulos, expreso, tanto el su amor y el de sus compañeros a Yeshua, como el miedo de todos ellos.
Juan 11: 17 “Cuando Yeshua llego, se entero que hacia cuatro días Lázaro estaba en el sepulcro”
Cuando las hermanas le envían el mensaje a Yeshua, Lázaro estaba muy grave, y parece que cuando regresa el mensajero, Lázaro fallece. De esta manera, cuando Yeshua llega a Betania el difunto estaba ya cuatro días en el sepulcro.
Juan 11:18-27 “Betania estaba cerca de Jerusalén, como a tres kilómetros, por esto mucho Judíos habían venido a consolar a Marta y a María por la muerte de su hermano. Y cuando Marta oyó que Yeshua venia, Le fue a recibir, pero María se quedo sentada en casa. Y Marta dijo a Yeshua: Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto. Aun ahora, yo se que todo lo que le pidas a Dios, Dios te lo dará. Entonces Yeshua le dijo: Tu hermano resucitara. Marta le contesto: Yo se que resucitara, en la resurrección, en el día final. Yeshua le contesto: Yo soy la resurrección y la vida, el que tiene Fe en Mí, y si muere, vivirá. ¿Tienes Fe en esto? Ella le dijo: Si, Señor, yo he tenido fe que Tu eres el Mesías (el Ungido), el Hijo de Dios, el que viene a este mundo.”
Por un lado, la familia de Lázaro era respetada y conocida, así que tenían muchas amistades, por otro lado, Betania estaba muy cerca de Jerusalén, por esto vinieron muchos , mayormente de los Fariseos a mostrarles su amistad a las hermanas, y acompañarlas en los siete días de luto, por la muerte de Lázaro.
Así que, era ya el cuarto día de luto, cuando Marta supo que Yeshua estaba por llegar, y fue inmediatamente, sola, a recibir al Maestro, y le reclamo respetuosamente por no haber llegado a tiempo, para sanar a su hermano, pero, al mismo tiempo Le mostro su confianza, al decirle: yo se que Dios te da todo lo que Le pidas. Yeshua respondió a su confianza y le anuncio que Lázaro volverá a vivir. La respuesta de Marta indica que ella, como los Fariseos, creía en la resurrección de los muertos, tal como predice Daniel 12:2. Entonces el Maestro le enseño que la promesa de la resurrección de Daniel 12:2 se asienta en El, porque El es la resurrección y la vida de los de la fe.
Se nota que Marta estaba al tanto del mensaje salvador de Yeshua, cuando le contesta, que ella tiene Fe que El es el Ungido, el Hijo del Altísimo, el Prometido a Abraham.
Juan 11:28-37 “Habiendo dicho esto, Marta se fue y llamo a su hermana María, diciéndole en secreto: El Maestro esta aquí y te llama. Tan pronto como ella lo oyó, se levanto rápidamente y fue hacia El. Ahora, Yeshua no había entrado aun en la aldea, sino que todavía estaba en el lugar que Marta Le había encontrado. Entonces, los judíos que estaban con ella en la casa consolándola, cuando vieron que María se levanto de prisa y salió, la siguieron, suponiendo que iba al sepulcro a llorar allí. Al llegar María donde estaba Yeshua, cuando Le vio, se arrojo a Sus pies, diciendo: Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto. Ahora, cuando Yeshua la vio llorando, y a los Judíos que vinieron con ella, también, llorando, se sacudió profundamente en su espíritu y se entristeció. Luego pregunto Yeshua ¿Dónde le pusieron? Le dijeron: Señor ven y ve.- Entonces Yeshua lloro- por eso los judíos decían: Vean como le amaba. Sin embargo, algunos dijeron: Este que abrió los ojos del ciego, también podía haber evitado que este muriera.”
Marta regreso a su casa y le aviso a su hermana que el Maestro la llama, en seguida, María fue donde Yeshua, que se había quedado a las afueras del pueblo, también sus amigos Judíos la acompañaron, porque creían que va a llorar al muerto. María se postra a sus pies y brotan las mismas palabras que las de su hermana: Si hubieras estado aquí, Lázaro no habría muerto. Yeshua ve el llanto de María y de los judíos y se indigna en su espíritu, y se aflige, por el dolor que causa la muerte.
En seguida Yeshua quiere ver donde esta sepultado Lázaro, y al llegar al sepulcro, Yeshua también llora. Entonces, algunos judíos vieron en Su llanto Su amor por Lázaro. Al contrario, otros Judíos argumentaron: tiene el poder para dar vista a los ciegos, pero, porque no le curo a Lázaro.
Juan 11:38-44 “Y Yeshua, de nuevo profundamente conmovido, fue al sepulcro. Era una cueva, y tenía una piedra puesta sobre ella. Quiten la piedra, dijo Yeshua. Marta, hermana del que había muerto, Le dijo: Señor, ya huele mal, porque hace cuatro días que murió. Yeshua le dijo: ¿No te dije que si tienes fe, veras la gloria de Dios? Entonces quitaron la piedra, Yeshua alzo los ojos, y dijo: Padre, Te doy gracias porque Me has oído. Yo sabía que siempre Me oyes, pero Lo dije por causa de la multitud que me rodea, para que crean que Tú me has enviado. Habiendo dicho esto, grito con fuerte voz: ¡Lázaro, sal fuera! Y el que había muerto salió, los pies y las manos atadas con vendas, y el resto envuelto en un sudario. Yeshua les dijo: Desátenlo, y déjenlo ir.”
Por segunda vez Yeshua se indigno en su espíritu, debido a que la muerte va a ser el destino final de la mayoría de la humanidad. Después se dispuso a darle vida a Lázaro. Entonces pidió que retiren la piedra que tapaba la entrada al sepulcro, que era una cueva. Pero Marta le advirtió que el cadáver estaba descompuesto, y le sugirió que mejor seria no destapar la cueva. No obstante, Yeshua la anima a que tenga fe, para que vea el milagro de Dios.
Una vez que retiraron la piedra, Yeshua le dio gracias al Padre, porque Su petición, que sus discípulos, y otros vean su poder para resucitar y tengan fe, había sido oída. Así mismo, Yeshua tenia muy presente que sus discípulos, y algunos Judíos necesitaban esta fe, que les sostenga, cuando El muera en la cruz.
En seguida, grito con una voz fuerte: Lázaro, sal fuera. Y el salió con su cuerpo todavía atado, y su rostro tapado con una tela. Entonces el Maestro les ordeno que le quiten las ataduras y le dejen caminar.
Note, que aunque Yeshua había resucitado a dos personas antes que a Lázaro, sin embargo los detalles de esos prodigios eran escasos. Pero al contrario, en este milagro han sido narrados todos los antecedentes, para que nosotros tengamos presente que Nuestro Señor tiene el poder de dar vida a los de la fe.
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