El
Verbo se humanizo para traer la gracia a la humanidad caída, y reemplazar a la
ley, y de esta manera, acabar con la esclavitud al pecado. La gracia es la
conducta victoriosa de Jesús, que culmino con Su muerte y resurrección, y es
dada a todo el que presta atención a la historia de Jesús, así, la gracia mora
en su espíritu.
Colosenses 1:1” Pablo, apóstol de Jesús,
el Mesías, por determinación de Dios, y el hermano Timoteo”
Pablo
fue enviado por Jesús a Colosa, porque Dios había decidido dar la salvación a
algunos habitantes de esa pequeña ciudad, situada en lo que se conoce hoy como Turquía.
Los habitantes de ese pueblo eran, nativos, inmigrantes griegos y judíos. Pablo
fue a Colosa, acompañado de Timoteo, un creyente de Asia menor.
Colosenses 1:2 “A los santos hermanos
de fe en el Mesías, que están en Colosas, gracia y paz a ustedes, de parte de
Dios, nuestro Padre”
Las
personas, que, al oír la historia de Jesús relatada por Pablo, la aceptaron,
llegaron a ser hermanos de fe. A ellos, Dios el Padre les envió por medio del Espíritu
Santo, la conducta de Jesús, actualizada para cada circunstancia de la vida de
los creyentes, a fin de reemplazar, y cubrir el comportamiento natural de
ellos.
Colosenses 1:3 “Siempre que oramos
por ustedes damos gracias a Dios, el Padre de nuestro Señor Jesús, el Mesías”
Pablo
y su compañero Timoteo, se dirigían a Dios, para agradecerle por la obra que había
aprobado que Jesús encomiende hacer al Espíritu Santo en favor de los fieles de
Colosa. Por otro lado, continuamente resalta que Dios, el Padre, Dios, el Hijo
y el Espíritu divino están activos para el crecimiento de los de la fe
Colosenses 1:4” Hemos oído de la fe
de ustedes en Jesús, el Masías, y de su amor a todos los santos”
La
fe y el amor son los dos mandamientos para los fieles del nuevo pacto; en otras
palabras, quedo atrás, en el pacto antiguo, la obediencia personal a los diez
mandamientos, ahora, en el pacto nuevo la obediencia perfecta de Jesús cubre a
los creyentes, por esto reciben el Espíritu Santo, y pueden tener fe y amar.
Colosenses 1:5 “Por medio de la
esperanza reservada para ustedes en el cielo. Esta esperanza anticipada en la
palabra de verdad del evangelio”
La
fe y la esperanza, ambas son la palabra de Dios en la mente, la diferencia es
que la fe es la palabra de Dios que relata la historia de Jesús, o sea esta en
el pasado, y la esperanza es la palabra de Dios que anticipa acontecimientos
del futuro. Estos eventos futuros son la hoja de ruta del gobierno del cielo.
Colosenses 1:6 “En verdad se acerco a
ustedes la gracia de Dios, desde el día que la oyeron y conocieron, y está
fructificando en ustedes como en todo el mundo”
Los
habitantes de Colosa, que escucharon la historia de Jesús, que cargo los
pecados de la humanidad en Su cuerpo a la cruz, y que Su vida perfecta cubre la
de los fieles de Colosa, dieron los frutos del Espíritu Santo, de mansedumbre,
humildad, bondad, tolerancia, dominio propio.
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